Bordeada por toda la costa de los estados Miranda, Anzoátegui y Sucre, la Fosa de Cariaco es una depresión marina ubicada en la plataforma continental del oriente venezolano, donde se enfrentan el enigma y la ciencia.
Mientras los pescadores de la zona temen adentrarse en sus aguas por temor a perder las embarcaciones e incluso sus vidas, la fosa de Cariaco ha ganado relevancia como estación de muestreo del Proyecto Cariaco el cual estudia cómo los cambios del clima afectan a los océanos.
La Fosa de Cariaco, de significativa importancia para la pesca en el oriente del país, es la segunda cuenca anóxica natural (tiene agotado el oxígeno disuelto) más grande del planeta, después del Mar Negro. Gran parte de su misterio está referido a su impresionante abismo, cuya profundidad todavía es desconocida. Hasta ahora solo se ha llegado a un registro de 1400 metros, en su epicentro.
Calmadas playas que esconden un precipicio
Pocos turistas creen que las playas calmadas, tibias, cristalinas y poco profundas del Golfo de Cariaco esconden un peligroso precipicio, hasta que se aventuran a pasar la línea entre el azul claro y al azul oscuro del mar. O hasta que un aventurero asustado narra la desagradable experiencia.
Es cierto que en estas playas se puede caminar mar adentro sin un fuerte oleaje y con poca profundidad. Eso sí, con atención a los erizos que abundan en algunos balnearios. Pero, en efecto, se llega a un claro contraste en el color del mar. Es la señal que indica que el avance debe parar.
Las y los intrépidos que han cruzado la línea se han devuelto en poco tiempo y han contado que llega un momento en el que dejan de tocar fondo bruscamente, como ante un precipicio y que el agua se vuelve helada. Es la antesala a la fosa de Cariaco. La mayoría coincide en que se sintieron en peligro y que no volverían a ese lugar.
La tragedia del ferry Santa Margarita II
Famosa es la historia sobre la tragedia del Santa Margarita II, embarcación de Conferrys C.A, empresa que cubría rutas entre la isla de Margarita, Cumaná y el Litoral Central. Data de la década de los 80 y es recordada, porque el barco despareció en las profundidades de la Fosa de Cariaco.
Testigos afirmaron que el mar enfureció de tal manera, que las amarras del ferry a la plataforma de embarque del puerto de Cumaná, se rompieron. Ya a la deriva, el Santa Margarita II dio vueltas sin control hasta que fue, literalmente, devorado por las aguas a la altura de la Fosa de Cariaco.
La historia se adereza cuando se afirma que el célebre oceanógrafo y explorador marino, Jacques Cousteau, fue contratado para buscar al Santa Margarita II, pero que, tras la primera inmersión, no volvió a intentarlo y se fue del país sin cobrar sus honorarios.
Atracción magnética de la fosa
Leyenda o realidad, lo cierto es que la historia del naufragio del ferry Santa Margarita II se mezcla con las versiones sobre la atracción magnética que, según los pescadores, arrastra a su peñeros u otras embarcaciones hacia la Fosa de Cariaco.
También se habla sobre la percepción de extraños ruidos y zumbidos desde las aguas de la Fosa (que algunos atribuyen a la zona de fallas de El Pilar), así como del avistamiento de luces brillantes que entran y salen de ellas, por lo que los pescadores se encomiendan a la Virgen del Valle, Patrona del oriente venezolano.
Pese al temor, la situación no interrumpe la actividad pesquera, pues estacionalmente las aguas profundas de la fosa se mezclan con las aguas de la superficie, por acción de los vientos alisios, proporcionando una gran cantidad de nutrientes a la vida marina que existe en sus alrededores.
“Proyecto Cariaco: Ventana a la Oceanografía en Venezuela”
Con la participación del Instituto Oceanográfico de Venezuela (IOV), la Universidad de Oriente, el Instituto de Tecnología y Ciencias Marinas (ITECMAR) de la Universidad Simón Bolívar y la Fundación La Salle, en el ano 1995 se inició el “Proyecto Cariaco: Ventana a la Oceanografía en Venezuela”.
Con este proyecto se prevé certificar el impacto del estudio aplicado en materia del cambio climático, ya que la Fosa de Cariaco cuenta con condiciones únicas en el mundo para crear un registro de lo ocurrido en la superficie del océano durante los últimos 15.000 años.
Esto se debe a que en su interior hay ausencia completa tanto de oxígeno como de luz y, además, no llegan corrientes, por lo que en ella no existe vida marina de ningún tipo. Salvo posibles organismos multicelulares aeróbicos, de acuerdo a recientes investigaciones.
Información hidrográfica, meteorológica, geológica, química y biológica
En marcha desde 1995 y posteriormente reconocido por la Unesco, el Proyecto Cariaco ha generado una gran variedad de información hidrográfica, meteorológica, geológica, química y biológica.
Con estos insumos, los científicos han podido estudiar la relación entre los cambios en el clima local y global, la hidrografía y la producción primaria, así como el flujo de sedimento y carbono dentro del mar y hacia la atmósfera.
Este Proyecto vinculado al Plan de la Patria, dada la extensión de costas de Venezuela en el Mar Caribe, reviste importancia geopolítica y geoestratégica para asegurar la seguridad y soberanía alimentaria, pues permitirá responder a los efectos del cambio climático, así como a estimar y tomar medidas sobre la producción pesquera y de otras especies.
Con información de En el tapete, Fundación La Salle, Periodismo ante el Cambio Climático y Ecured
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