Los océanos son imprescindibles para la vida en el planeta, especialmente para la subsistencia de la especie humana, sin embargo justamente están entre los hábitats más afectados por la acción del hombre. La situación ha llegado a ser tan grave que estos grandes cuerpos de agua se están quedando sin oxígeno, ante lo que hay que tomar acciones urgentes pues salvarlos significa salvar nuestras vidas.
Las consecuencias de nuestras acciones en los océanos están a la vista y han sido confirmadas una y otra vez por diferentes estudios: el aumento de temperaturas y de niveles de CO2 con la consecuente des-oxigenación de los océanos; la acidificación que causa reducción de los niveles de PH oceánico a escala mundial; la proliferación de desechos; la alteración de la cadena alimentaria de las especies marinas, son sólo parte de muchos factores que arriesgan la supervivencia de los ecosistemas marinos.
Es necesario tomar conciencia porque no solo son una fuente de valiosos recursos naturales para el ser humano, sino que sin ellos las condiciones climáticas del planeta serían insoportables para subsistir, pues constituyen importantes reguladores, sin los cuales sería mayor el impacto de los gases de efecto invernadero en el ambiente.
¿Cómo podemos salvar los océanos?
Si queremos salvar los océanos es necesario actuar ya. Cada uno de los habitantes de este planeta puede aportar comenzando por cambiar las cosas en su radio de actuación. Compartimos a continuación algunas ideas sobre cómo podemos contribuir a cuidarlos:
- La primera acción debe ser aplicar el principio de las “Tres erres”: reduce, reutiliza y recicla.
- Realiza acciones que puedan contribuir a reducir tu consumo de energía y tu huella en el planeta. Por ejemplo puedes comenzar colocando bombillos ahorradores en tu casa y trabajo, caminar más y usar medios ecológicos como bicicletas antes de trasladarte en tu vehículo particular. Toda acción que puedas hacer para reducir tu gasto energético también ayudará a los océanos del planeta.
- Antes de comprar y consumir especies marinas recuerda que las poblaciones mundiales de peces se han reducido debido a la demanda, pérdida de hábitat y prácticas de pesca no sustentables. Asegúrate de que lo que compres haya sido pescado o cultivado respetando al medio ambiente. Es importante también conocer las especies que están sobreexplotadas como el tiburón, la merluza blanca, el bacalao del Atlántico o el pez espada, e intenta reducir su consumo optando por otras.
- Los científicos advierten que para el 2050 habrá más plástico que peces en el mar, por eso es vital disminuir e incluso eliminar, el uso de plásticos en especial los de un solo uso. No tomes bebidas en botellas desechables, recuerda que el porcentaje de reciclaje en todo el mundo es de solo 25%, la mayor parte de los desechos plásticos terminan en el océano y toma por lo menos 450 años para que se degrade.
- Cuando compres productos de higiene personal, evita los que contengan microplásticos: “polipropileno”, “polietileno”, “tereftalato de polietileno” o “polimetil metacrilato” ya que pueden llegar a los océanos y contaminarlos, incluso al ser ingeridos por los peces pueden volver a ti en la cadena alimenticia.
- Cuida las playas, cuando estés allí asegúrate de recoger tus residuos. Explora y aprecia el océano sin interferir con la vida salvaje y no intervengas rocas o corales, e incentiva a otros a respetar el entorno marino. Aquí podrás encontrar más tips relacionados.
- No compres productos que exploten la vida marina tales como joyería, accesorios u ornamentos con elementos provenientes de los océanos como estrellas de mar, caracoles, tortugas, tiburones o ballenas.
- Evita echar por el drenaje de tu hogar desechos que puedan contaminar, tales como químicos, aceites usados o excrementos de mascotas que puedan contener agentes patógenos dañinos.
- No pongas en tu acuario peces de agua salada, ni tampoco liberes especies de acuario en el océano u otros cuerpos de agua, ya que puedes introducir especies no nativas que podrían ser dañinas para el ecosistema local.
- Muévete de manera responsable por los océanos y realiza tus actividades acuáticas con respeto al medio ambiente. Por ejemplo no hagas cambio de aceite ni trabajos de mecánica de las embarcaciones en el mar.
- Busca información sobre los océanos y vida marina, en internet, libros, enciclopedias o mira documentales sobre el tema. Descubrirás que toda la vida sobre la tierra está conectada al océano y sus habitantes; mientras más aprendas sobre el tema, más desearás asegurar su bienestar. Luego comparte la información para inspirar a otros.
- No tires colillas de cigarrillos en la calle. Cada año se desechan 4.5 billones de colillas en el mundo y una buena parte de ellas, terminan en los océanos y los contaminan con ingredientes químicos que pueden matar a la fauna marina.
- Elige productos de agricultores y mercados locales, en lugar de los de las grandes cadenas de supermercados que están envueltos en plástico. Cuando tengas la posibilidad de elegir, opta por envases y recipientes de papel y de vidrio.
- Prefiere practicar deportes sin motor, y realízalos con respeto al hábitat marino. Determinados deportes de mar como las motos acuáticas contaminan el medioambiente y las aguas.
Con información de National Geographic, Medium, Surferrule y Aquarium Costa de Almería
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