El mural Amalivaca, Mito Caribe de la Creación fue realizado con miles de multicolores mosaicos vidriados, sobre una pared cóncava, que entre luces y sombras se conjugan para contarnos cómo Amalivaca y su hermano Vochi llegaron navegando sobre las inmensas olas, en una extraña y pequeña embarcación, a repoblar con los frutos de la palma de Moriche la tierra de los Tamanacos, un pueblo originario de lengua Caribe que una vez habitó en las riberas del río Orinoco.
Autor: César Rengifo, pintor y dramaturgo venezolano nacido en Caracas el 14 de mayo de 1915, ciudad donde fallece el 2 de noviembre de 1980.
Ubicación: Torre Norte, Centro Simón Bolívar, urbanización El Silencio, Caracas.
Características: Mural cerámico elaborado entre 1954 y 1955, por partes, con miles de mosaicos venecianos de 3 cm cuadrados, previa realización de todos los bocetos de las distintas escenas que componen la narrativa plástica en papel papel kraft: desde la aparición de Amalivaca entre las fuertes olas y remolinos, el nacimiento de los Tamanaco como pueblo a partir de los frutos de la palma de Moriche, la recolección, la casa y la pesca, hasta la llegada de los españoles y la colonización.
Las piezas de color dorado, empleadas en los brazaletes y tocados, se fabricaron con chapillas de oro de 1mm fundidas en vidrio, por el propio César Rengifo en su taller.
Una vez culminada cada parte del mural de manera que al unirlos en una sola pieza, no se perciban las divisiones entre las partes, el dibujo completo fue transferido al muro donde el artista adosó cada pieza hasta completar esta imponente obra de gran formato.
El mural fue concebido como una totalidad, sin embargo cada una de las partes tiene sentido y significado por separado. El espectador solo puede percibir las ligeras divisiones entre los paneles si observa muy cerca.
Dimensiones: 28 metros de longitud y 2.8 metros de altura.
Obra instalada: 1954-1955.