Con los rítmicos acordes de nuestra música, el ensamble de jóvenes venezolanos de la Fundación Amanauk ganó el primer premio, con mención honorífica, del VIII Concurso Internacional de Guitarra Alirio Díaz realizado en Roma, Italia.
Una perfecta puntuación de 100 dio a los jóvenes criollos del Ensamble Armónical CFC Amanauk, la primera premiación en la categoría Ensamble de Guitarra, de 20 a 22 años.
Los interpretes criollos se enfrentaron a músicos de los mejores conservatorios del mundo: Austria, Holanda, Estados Unidos y al anfitrión, Italia, alcanzando un triunfo que confirma el extraordinario talento y la tenacidad de nuestros jóvenes, que en la música también conforman una generación de oro, representante de lo afirmativo venezolano.
Afianzando nuestras raíces
En el conservatorio de música de la capital italiana sonaron guitarra, cuatro, bandolina y maracas interpretando «Apure en un viaje» de Genaro Prieto, en un ensamble con sabor a Venezuela con el que los jóvenes músicos, provenientes del estado Lara, lograron alcanzar el primer lugar.
Son muchachos y muchachas que forman parte de la Fundación Escuela Integral de Formación Cultural-Musical Amanauk. Su nombre proviene de la lengua pemona y significa “nuestras raíces”. Y qué mejor denominación para una organización que va al corazón de la comunidad del barrio El Carmen, ubicado en la parroquia Unión, del estado Lara, para realzar el talento musical y artístico de 220 niños, niñas y adolescentes.
El esfuerzo de la fundación, a cargo del profesor Jean Carlos Figueredo, el trabajo con pequeños desde los cinco años de edad, está dando resultados tangibles ubicada en una humilde casa de del barrio.
“En Venezuela hay talento para exportar, piedras preciosas que existen, que están trabajando para dar lo mejor”, asegura Figueredo y hace un llamado a exaltar los valores genuinos de lo afirmativo venezolano, nuestras raíces.
Voluntad afirmativa
Como muchas historias de venezolanos de hoy en día, los jóvenes músicos de la Fundación Amanauk lograron con voluntad y tesón imponerse a las dificultades para perseguir sus sueños y dejar en alto el nombre de su país.
Lograron sobreponer las limitaciones y retos que atraviesa el país por el bloqueo económico y concretaron el apoyo para el viaje pocos días antes del concurso.
El profesor Jean Carlos Figueredo relató que llegaron al conservatorio de música en Roma el mismo día de su presentación, y tuvieron que tocar sin practicar, pero con las ganas y la bandera de Venezuela en alto, seguros de tener lo necesario para traer el triunfo al país.
El resultado: el primer reconocimiento de carácter internacional de la organización y sus talentosos muchachos, quienes derrocharon talento en esta fiesta de cuerdas.
Concurso con historia
Por ocho ediciones el Concurso Internacional de Guitarra Alirio Díaz para Jóvenes Guitarristas ha estado abierto a participantes de cualquier nacionalidad: solistas o ensambles de guitarra y agrupaciones de música de cámara que incluyan guitarra, cuerdas, maderas y metales.
Su objeto es promover el intercambio cultural de jóvenes guitarristas de distintas partes del mundo, y se realiza cada año en honor a uno de los más destacados intérpretes de la guitarra clásica de Venezuela, Alirio Díaz.
La octava edición del concurso se realizó el 4 y 5 de septiembre 2019, en el Istituto Centrale per i beni Sonori ed Audiovisivi, ubicado en la Vía Michelangelo Caetani 32, Roma, Italia.
Alirio Díaz, una guitarra venezolana en el mundo
Oriundo de Carora, estado Lara, Alirio Díaz fue uno de los más importantes guitarristas de Venezuela. Tras una fructífera experiencia en su país natal, se trasladó a Europa donde siguió con sus estudios en España e Italia.
Hoy es reconocido en todo el mundo como la guitarra clásica del siglo XX e inicios del XXI. Su gran satisfacción fue llevar en alto el nombre de nuestro país, interpretando los más sentidos temas del pentagrama popular venezolano, junto a la música académica europea.
Si bien el maestro Alirio Díaz hizo de Italia su segunda patria, nunca perdió el contacto y el interés por las manifestaciones musicales de la cultura popular venezolana, lo que plasmó en artículos y libros como “Música en la vida y lucha del pueblo venezolano” y “Al divisar el humano de la aldea nativa”, obra autobiográfica.
A sus 92 años, el maestro Alirio Díaz falleció en Roma el 5 de julio de 2016.
A los talentosos muchachos de la Fundación Amanauk no sólo les queda el orgullo de haber representado su país en uno de los concursos más importantes del mundo, sino además la satisfacción de representar el legado musical de uno de los guitarristas más reconocidos del mundo entero, Alirio Díaz, representante de lo afirmativo venezolano.
Con información de Alba Ciudad, Telesur, Inces y Radio Otilca
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