Al final de la calle La Florencia en Petare está la Casa Borges, una de las varias joyas arquitectónicas que alberga esta popular parroquia del municipio Sucre, estado Miranda.
Los 6.137 m2 de construcción dan cuenta de la magnitud de esta obra de la década de 1950, levantada sobre la colina y en un terreno de más 2 hectáreas de las cuales, 1 y media corresponden a áreas verdes.
El diseño y construcción de esta monumental villa, hogar de la familia Borges Zing desde 1959 hasta 2006, fue encomendada al arquitecto italiano Athos Albertoni, con la colaboración de su colega y paisano Guido Guazzo.
Hoy, este hermoso inmueble de la arquitectura moderna es la sede del Centro Cultural Casa Borges, adscrito a la Alcaldía de Sucre. Un espacio para la comunidad petareña donde se propicia el desarrollo social, educativo, cultural y económico mediante el intercambio de saberes, conversatorios, talleres, exposiciones y distintas actividades recreativas.
Un reino residencial a las afueras de Caracas
La historia de la majestuosa villa, construida entre 1956 y 1958, inició cuando René Borges Villegas, ingeniero y piloto de helicópteros adquiere el terreno descubierto en uno de sus vuelos por la ciudad. Un lugar estratégico, en Petare, rodeado de pocos edificios y escasas viviendas informales, desde donde se podían apreciar las verdes montañas y las vistas 360° del Valle de Caracas.
El proyecto de la monumental casa fue esbozado a partir de las ideas de Borges Villegas, entonces diputado del Congreso de la República, quien participó activamente en la construcción y diseño de interiores de la que sería un hogar para su esposa Nelly Zingg Aranguren.
Algunos detalles sobre el proceso fueron revelados por Guido Guazzo, quien colaboró con su colega Athos Albertoni, encargado del proyecto e hizo la maqueta presentada a Borges Villegas. Vivió en el país desde ese momento y validó su título en la Facultad de Arquitectura de la Universidad Central de Venezuela, institución de la que fue docente por muchos años.
En una entrevista ofrecida al diario El Universal en febrero de 2009 Guazzo dijo: “Llegué al país en 1956 y conocí a la esposa e hijos de Athos Albertoni. Él me invitó al terreno y allí me presentó a René Borges Villegas (…). Cuando lo conocí me di cuenta de que tenía una cultura universal impresionante, que la obtuvo de sus viajes a Europa (…). Borges me dijo que en vez de gastar plata en el extranjero quería dejar un monumento en Venezuela para que sus ciudadanos conocieran una construcción de un hombre renacentista, con ideas de artistas como Miguel Ángel y Leonardo da Vinci”.
Una villa concebida como un palacio
Esta obra calificada como una villa fue concebida como un palacio. Además de los espacios monumentales con “amplios ventanales, generosas escaleras y dobles alturas, (…) voladizos que denotan la presencia de marquesinas, techos y terrazas”, así como una “fluidez espacial entre el interior y el exterior”, exhibe un grupo de obras de arte integradas a la arquitectura.
Hannia Gómez, citada en el blog de la Fundación Arquitectura y Ciudad, escribió sobre la Casa Borges en Las Italias de Caracas lo siguiente: “El gran salón a doble altura está flanqueado al este por una colección de apliques en vidrio de Murano, tipo ‘scavo’, del gran artista italiano de la Casa Cenedese Vetri, Napoleone Martinuzzi; el baño principal cuenta con dos hermosos plafones de vidrio atribuidos a la casa Verrieres Artistiques Barovier & Toso … y dos apliques murales tipo acuario de otro maestro de Cenedese Vetri, Alfredo Barbini. Finalmente, sobre los muros de la gran escalera, de la chimenea y del pabellón de la piscina se encuentran colocadas una serie de diecisiete extraordinarias esculturas cerámicas atribuidas al maestro argentino-italiano Lucio Fontana”.
Su estructura es de concreto y sus fachadas están constituidas por una serie de planos horizontales y verticales que se articulan entre sí. La edificación evidencia una notable influencia de la obra del arquitecto estadounidense Frank Lloyd Wright, que se refleja en el predominio de la horizontalidad del volumen.
La Casa Borges
Con sus tres plantas, la Casa Borges tiene 17 habitaciones, de las cuales tres son principales y cuatro son familiares. Todas ellas diseñadas y construidas para que entrara el sol de la mañana y luz natural en la tarde.
Otro dato interesante de la edificación de los años 50 es que fue dotada de una planta eléctrica y un tanque de agua ubicado en los sótanos; así como un incinerador y una central telefónica. También cuenta con un búnker de seguridad con baño, cuarto, cocina y un pasaje secreto con salida oculta al exterior.
Pero, además, hay que mencionar la incorporación de ascensores para los inquilinos y visitantes, otro para la comida, cocinas y hornos diseñados para funcionar con electricidad, gas y leña, ductos para la ropa sucia, un comedor para 24 personas, un estacionamiento para 20 vehículos y una piscina, entre otros lujos.
Al Sur del terreno de 21.231 m2 (más de 2 hectáreas) se encuentra una estructura de planta circular, protegida por una cubierta construida por planos alabeados radiales en concreto armado, diseñada como observatorio astronómico.
Declarada Bien de Interés Cultural el 20 de febrero de 2005, la sede del actual Centro Cultural Casa Borges forma parte del centenar de edificaciones patrimoniales del municipio Sucre, por su significación histórica-estética para la Región Metropolitana de Caracas.
Con información de Fundación Arquitectura y Ciudad, Guía de Caracas (Caracas del valle al mar) y Catálogo del Patrimonio Cultural Venezolano 2004-2008. Municipio Sucre, estado Miranda
Fotografías de Fundación Arquitectura, Guía de Caracas (Caracas del valle al mar) Ciudad y Wikipedia
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