El vidrio, uno de los materiales más antiguos empleados por el hombre, es 100 por ciento reciclable, un número ilimitado de veces sin perder sus propiedades. ¿Por qué es importante reciclarlo?
Al reciclar las botellas, frascos, tarros y otros productos elaborados con vidrio contribuimos a:
Disminuir los residuos que terminan en los vertederos (tiraderos, rellenos sanitarios o basureros), de forma considerable. Se estiman 1.000 kilos de basura menos, reciclando tan solo 3.000 botellas.
Reducir la contaminación del aire hasta en un 20 %. En el proceso de fabricación con vidrio reciclado disminuye el uso de combustibles ya su vez, la emisión de gases y partículas.
Por ejemplo, se calcula que la producción de un 10% de envases de vidrio reciclado, emite a la atmósfera hasta un 8 % menos de partículas; 10 % de óxidos sulfúricos y 4 % de óxidos de nitrógeno.
Además, por cada tonelada de vidrio reciclado al menos 300 kg de CO2, dejan de sumar a la enorme cantidad de gases de efecto invernadero presentes en la atmósfera.
Menor consumo de energía. Un ahorro de entre 20 y 30 % se puede alcanzar en el proceso de fabricación de envases a partir de vidrio reciclado, debido a que el punto de fusión es menor que el requerido cuando se producen con las materias primas.
Ahorro en el consumo de energía. En la fabricación de envases a partir de vidrio reciclado, se puede ahorrar entre un 20 y 30% de energía.
Esto se debe a que el punto de fusión del vidrio reciclado es menor que el de las materias primas que se suelen utilizar para fabricar envases nuevos, y por tanto también la energía que se necesita en el proceso.
Evitar el despilfarro de materias primas. Al reciclar 3.000 botellas de vidrio, se estima un ahorro de 1,2 toneladas de materia prima (arena, piedra caliza y carbonato de sodio), lo que reduce al mismo tiempo los requerimientos de extracción y el impacto en el medio ambiente.
¿Cómo se recicla?
La cadena de reciclaje del vidrio inicia con los consumidores. Lo primero es separar los envases elaborados con este material del resto de los residuos. Colócalos en un lugar distinto al resto de la basura pero antes, debes lavarlos con agua hasta que queden limpios.
Si en la zona donde vives no hay contenedores para el reciclaje de vidrio, busca los puntos de recolección más cercanos. En caso de no contar con esta alternativa, puedes optar por darle una nueva vida a los envases en tu casa.
La ventaja de las botellas, frascos y tarros es que puedes usarlos, una vez limpios, para guardar aceite, vinagre, agua, etc.; así como para almacenar alimentos granos, cereales, arroz, galletas, pasta; refrigerar salsas, dulces y mermeladas caseras, entre otros usos.
También puedes alargar su vida con ingenio y creatividad decorar tu casa o espacio de trabajo, elaborar regalos, etc., pero eso es tema de otra entrega que haremos próximamente.
Reciclaje paso paso
Una vez trasladados los residuos depositados en los contenedores a la planta de reciclaje el proceso consiste en:
- Separación y clasificación del vidrio por color y elementos.
- Retiro de todo material diferente al vidrio.
- Finaliza cuando el vidrio se tritura, se funde con arena y mezcla con hidróxido de sodio y caliza. para fabricar nuevos productos.
Datos curiosos
> Tres botellas recicladas, equivalen a la energía utilizada lavadora encendida todo el día.
> La energía que se ahorra reciclando cuatro botellas, es el equivalente a la que requiere una nevera para funcionar por 24 horas.
Con información de Ecología Verde, Ecología Hoy, Hablando en Vidrios y Azul Ambientalistas
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