La contaminación química ha superado el límite seguro para la vida en la tierra, al provocar la desestabilización en los ecosistemas, ya que se ha cruzado el umbral del entorno estable de los últimos 10.000 años.
Esa es la conclusión a la que ha llegado un equipo de investigación dirigido por Linn Persson, del Instituto Ambiental de Estocolmo, en un estudio publicado en la revista Environmental Science & Technology, en el que se ha advertido que el ritmo al que las sociedades están produciendo y liberando nuevos productos químicos al medio ambiente, no es consistente con permanecer dentro de un espacio operativo y seguro para la humanidad.
En el mismo informe se expresa que la tasa de producción de productos químicos está aumentando rápidamente y su liberación al medio ambiente, ocurre a mucha más velocidad que la capacidad de las autoridades para rastrear o investigar los impactos. Otro dato que aportan los científicos, es que la masa total de plásticos es superior a la masa total de los mamíferos vivos, lo que estaría indicando que la humanidad ha sobrepasado o cruzado un límite planetario relacionado con los contaminantes ambientales.
Producción de químicos se triplicaría en 2050
Según el estudio, 350 mil productos químicos sintéticos (incluyendo pesticidas, compuestos industriales y antibióticos) son ahora más preocupantes para la humanidad, ya que han provocado contaminación química. La producción de sustancias químicas se ha multiplicado por 50 desde 1950. Se prevé que se triplique de nuevo para 2050.
Solo la producción de plástico aumentó un 79 % entre 2000 y 2015, destaca el análisis de la investigación. Dentro de este grupo resalta la producción de plásticos vírgenes, asociados a las grandes emisiones de CO2 a la atmósfera; así como a la contaminación de cuerpos de agua y suelos, ya que se han encontrado plásticos usados desde la punta más alta del Monte Everest hasta los océanos más profundos de la tierra.
Otros productos químicos que superan el límite
Entre los productos químicos que supera el límite planetario, están los pesticidas, sustancias capaces de matar a muchos otros insectos que no son su objetivo principal, pero cuya importancia es vital para todos los ecosistemas.
Otro de los contaminantes que amenaza, de forma masiva y efectiva, son los clorofluorocarburos, químicos responsables de la destrucción de la capa de ozono. También los tóxicos y los antibióticos, estos últimos presentes en las aguas residuales con efectos indeseables en el medio. Además, también están los que son casi indestructibles y se acumulan de forma imparable, como las sustancias perfluoroalquiladas (PFAS, por sus siglas en inglés), que contienen flúor.
Solo se conoce una pequeña parte del impacto de esos compuestos sobre los organismos y ecosistemas. No obstante, los científicos concluyen que aún existe una gran cantidad de compuestos químicos en uso y que solo una pequeña fracción de estos, ha sido evaluada para determinar su seguridad.
¿Cómo se determinó el impacto?
Para determinar el impacto de la producción de los químicos, los científicos utilizaron la tasa de producción de estas sustancias, los efectos negativos de algunas de ellas, la extracción de combustibles fósiles para producirlos y su fuga al medio ambiente.
Todas estas variantes permitieron establecer que la emisión de agentes contaminantes como colorantes, materiales radiactivos o metales pesados, forman un cóctel de productos químicos sintéticos que inundan el medio ambiente y están acabando con el planeta.
En tal sentido, se recalca que el ritmo de producción y liberación de químicos a la naturaleza no es compatible con un futuro seguro para la humanidad y para el resto de ecosistemas globales, al impedir que el aire, el agua o los alimentos estén limpios. Pese a que los expertos han indicado que hubo datos limitados en algunas áreas, la evidencia de todo lo analizado le permitió concluir, sin dudas, que se ha pasado el límite seguro.
Los límites del planeta
Cambio climático, consumo de agua dulce, agotamiento de la capa de ozono, deforestación, acidificación de los océanos, pérdida de biodiversidad, cambios en el ciclo del nitrógeno y del fósforo, contaminación química y aerosoles o partículas contaminantes presentes en la atmósfera, son los límites planetarios que la comunidad científica determinó como problemáticas ambientales que amenazan la salud y desarrollo de la vida en el planeta Tierra.
Estos fueron establecidos por el equipo científico. En ellos se delimita la cantidad de contaminación que puede alcanzar la Tierra si quiere mantener el equilibrio. De los mencionados, nueve umbrales que no se debían pasar, ya cuatro lo han hecho: el cambio climático, el cambio en los usos del suelo, el ciclo tanto del nitrógeno como del fósforo, y la pérdida de biodiversidad.
Ahora se le suma la contaminación química, que guarda relación con la cantidad o el número y volumen de tales productos. Ésta ha llegado a un punto en el que ya no es posible evaluar o controlar el impacto de nuevos compuestos artificiales que acaban en el ambiente; así como las distintas repercusiones sobre los ecosistemas y la biodiversidad. En particular, porque la variedad de esos compuestos químicos está creciendo con inusitada rapidez.
Algunas soluciones
Ante la gravedad de la situación, la comunidad científica señala que es imprescindible avanzar hacia la solución de la problemática ambiental asociada a la contaminación química. Se apunta a la necesidad de cambiar a una economía más circular. Eso significa cambiar los materiales y productos para que puedan ser reutilizados, junto a regulaciones más estrictas y la fijación de límites en la producción y liberación de estas sustancias.
Otra vía planteada sería la de generar un modelo similar al acordado por las naciones para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. Las principales voces expertas también piden la creación de un organismo científico mundial para la contaminación química, similar al Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático de la ONU.
Con información de Investigación y Ciencia, Actualidad RT, Radiocable, Telecinco, El Desconcierto, Sopitas y Business Insider
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