Inicio EcoVidaActualidad Verde El demonio de Tasmania vuelve a nacer en Australia continental

El demonio de Tasmania vuelve a nacer en Australia continental

por Haiman El Troudi
3 comentarios
El demonio de Tasmania vuelve a nacer en Australia continental

Tres mil años después de su extinción en Australia continental, los demonios de Tasmania han vuelto a nacer en el entorno salvaje de ese país. Hecho que los conservacionistas han calificado como paso histórico para revitalizar el suelo australiano con el noble rugir de esta especie, cuyo nombre científico es Sarcophilus harrisii.

La ONG AussieArk, una organización de conservación de la fauna, informó en una publicación la liberación de 26 ejemplares de esta especie, considerada como el marsupial carnívoro de mayor tamaño del mundo, en el santuario de vida silvestre de 400 hectáreas en Barrington Tops Nueva Gales del Sur, al norte de Sidney.

Después de esta liberación inicial, los demonios de Tasmania se han reproducido con éxito. La primera camada ha sido de siete cachorros conocidos como joeys. El proyecto contempla nuevas liberaciones, estimadas en dos grupos de 20 ejemplares cada uno, a lo largo de dos años.

Incansable trabajo de 10 años

El demonio de Tasmania vuelve a nacer en Australia continental

Unos 10 años lleva AussieArk trabajando, sin descanso, primero para salvar al demonio de Tasmania de la extinción por una contagiosa enfermedad que los aqueja desde 1990. Luego para devolverlo a la Australia continental, con la esperanza de que se reproduzca y establezca una población sostenible.

En la estrategia para liberar a este legendario y famoso animal también colaboraron las organizaciones Global Wildlife Conservation y WildArk. En tal sentido, lo primero que hicieron fue rodear con vallas un gran tramo de bosque de eucaliptos protegidos al oriente de Australia.

El demonio de Tasmania vuelve a nacer en Australia continental

Después, fueron retiradas las plantas invasoras de la zona, la cual también quedó despejada de la horajasca, que puede provocar incendios forestales. Al principio fueron liberados 15 ejemplares.  Para vigilarlos, se usaron collares de rastreo por radio.

El equipo también colocó cadáveres de canguros para que se alimentaran y adaptaran a su nuevo hábitat. Una vez confirmado el éxito del primer grupo, fueron liberados los otros 11 ejemplares criados en cautiverio.

Estabilizar el ecosistema australiano

El demonio de Tasmania vuelve a nacer en Australia continental

La reincorporación del también llamado Diablo de Tasmania a Australia, busca otro gran beneficio: estabilizar el ecosistema del continente contra especies invasoras que han puesto en peligro la existencia de una valiosa fauna autóctona.

Se espera que esto se logre, pues como depredadores nativos y marsupiales carnívoros más grandes del mundo, los demonios ayudan a controlar a los gatos salvajes y a los zorros que amenazan a otras especies endémicas y en peligro de extinción, como ualabíes parma, bandicuts de nariz larga, canguros rata de hocico largo y canguros rata rojizos.

Además de constituir una de las únicas soluciones naturales para controlar poblaciones de zorros y gatos salvajes, el demonio de Tasmania también es carroñero, lo que ayuda a mantener su entorno libre de enfermedades.

Un demonio polígamo

El demonio de Tasmania vuelve a nacer en Australia continental

El Sarcophilus harrisiien es una especie polígama que alcanza su madurez sexual en el segundo año de vida. El apareamiento ocurre previa competencia masculina para conseguir a las hembras. Después de la cópula la pareja se separa, pero si la hembra no queda preñada o pierde al feto, puede volver al celo y aparearse.

La gestación dura aproximadamente 21 días y la camada es de 20 a 30 crías. Éstas se arrastran lentamente hasta la bolsa de la madre y luchan por alimentarse de uno de los 4 pezones que ella tiene.

Unos tres meses después, las crías salen del marsupio y se instalan en un sitio acondicionado con vegetación, del que un mes más tarde saldrán al ser destetados.

Temibles pero no para humanos

El demonio de Tasmania vuelve a nacer en Australia continental

Estos marsupiales tienen el tamaño aproximado de un perro pequeño. Pese a su reputación de temibles, no suponen ninguna amenaza para los humanos o el ganado.

En cuanto al peso, la hembra registra unos 6 kilos, mientras que el macho pesa hasta 8 kilogramos. Su pelaje es negro parduzco con manchones blancos en los costados del cuerpo y en la parte trasera.

Tiene una gran cabeza y su cola larga no prensil, que le aporta estabilidad cuando permanece inmóvil, posee en su base una glándula con la cual marca el suelo mediante el fuerte aroma acre que expide si se siente amenazado.

El demonio de Tasmania tiene un periodo de vida de 5 años en la naturaleza. De su cuerpo destaca su poderosa mandíbula, la cual puede morder con una fuerza de más de 53,35 kg y abrirse a 75-80 grados. Esto le permite rasgar eficazmente la carne y triturar los huesos de sus presas.

Refugiado en la isla de Tasmania

 

 

El demonio de Tasmania vuelve a nacer en Australia continental

Se estima que el demonio de Tasmania desapareció por completo de Australia continental, hace unos 3.000 años víctima de los dingos, una especie de perro salvaje no endémica del país. No obstante, se refugió en la isla de Tasmania donde logró supervivir porque el dingo nunca pudo perseguirlo hasta allá.

Pero no todo es felicidad en ese paraíso, pues desde 1996 es víctima de una enfermedad llamada tumor facial transmisible del diablo de Tasmania (DFTD), que termina en muerte casi en el 100% de los casos, lo que ha significado la desaparición del 85% de su población, y ha situado a esta especie en peligro de extinción.

Se trata de una enfermedad que provoca tumores en el rostro, se propaga a través de las mordeduras entre los diablos, cuando combaten por aparearse; es intratable y frecuentemente mortal.

Este cáncer, curiosamente contagioso, trae como consecuencia que los demonios mueran de hambre, cuando el tumor llega a la boca, porque se les hace imposible comer.

El regreso del demonio

El demonio de Tasmania vuelve a nacer en Australia continental

Como consecuencia de la mortal enfermedad que le causa tumores en el rostro a los demonios de Tasmania, se estima que su población en la isla homónima pasó de 150.000 a 25.000 ejemplares. Erradicar el contagio es otra de las razones para su regreso a Australia continental.

Específicamente lo que buscan los científicos, es crear una «población reservada» (en Australia) ante una enfermedad hasta ahora incurable, así como restaurar el entorno natural autóctono.

Los demonios de Tasmania que se reintroduzcan de ahora en adelante serán monitoreados a través de collares radio equipados con transmisores y cámaras trampa, entre otros dispositivos.

De esta manera, los investigadores podrán saber cómo les va, qué territorio reclaman como suyo, a qué desafíos se enfrentan, qué están comiendo y si se están reproduciendo. Los demonios son libres, ahora básicamente depende de que hagan lo suyo para sobrevivir y combatir a las especies invasoras.

 

Con información de DW, National Geographic, El Espectador, Play Ground, Diario As y El Mostrador


No te pierdas

La esperanza renace con el rescate del oso panda gigante

Nacen esperanzas de revertir extinción de insectos en el planeta

 

3 comentarios

Pablo alvarez abril 20, 2022 - 3:32 pm

La humanidad está reduciendo su huella ecológica, al incorporar especies de animales a su hábitat original.

Reply
Haiman El Troudi abril 21, 2022 - 8:08 pm

Si, pero aún queda mucho por hacer.

Reply
Francy Rivero junio 19, 2024 - 11:04 am

Buenos Dias…

Espero se encuentre bien, su información me interesa. No me podra facilitar el triptico de este animalito. Es para la exposición de mi hijo.

Reply

Deje un Comentario

@Copyright 2018-2024 | Haiman El Troudi | Todos los derechos reservados.

Si continuas navegando en esta web, aceptas el uso de las cookies Acepto Leer Más

Política de Cookies y Privacidad