Frente al majestuoso río Orinoco se yergue la Iglesia San José de Tucupita, primer templo católico de la actual capital del estado Delta Amacuro, erigido gracias al trabajo colectivo inspirado en la fe.
Constituida en uno de los íconos de la llamada Sultana del Mánamo, la iglesia San José de Tucupita contó con aportes económicos y materiales de la comunidad a lo largo de los años que duró su construcción y dotación.
La historia de este templo, considerado la estructura más antigua del estado Delta Amacuro, está vinculada a la misión de padres capuchinos entre quienes destacan un beato: fray Arcángel de Valdivia, mártir de la fe de la guerra civil española, y fray Bonifacio de Olea, el autor de la primera gramática Warao.
La historia de la iglesia de San José comenzó en 1888
La Iglesia San José de Tucupita está ubicada en el cruce de la avenida Arismendi con la Calle Mánamo, frente al Paseo Malecón. Pero su historia comenzó, en 1888, en una casa donde eran llevadas las imágenes de San José y de la Virgen del Monte durante las fiestas o cuando el sacerdote de Güiria pasaba rumbo a Ciudad Bolívar y de regreso.
Aunque ya asentada como la capital deltana, Tucupita era apenas un caserío del cual formaba parte la pequeña vivienda cedida por un general de apellido Simosa, cuyo piso era de cemento, las paredes de Bahareque y el techo de Zinc.
Esta casa – capilla, que fue la primera residencia de los padres que se asentaron en la zona, estaba al lado de la actual iglesia San José y funcionó como una botica llamada “La Fe”.
Una capilla-galpón
El proyecto inicial de la iglesia San José data de la primera década del siglo XX. Impulsado por el general José Osorio, entonces gobernador de la región, se construyó una capilla con forma de galpón y mayor capacidad que la casa que cumplía estas funciones, gracias a los materiales usados por la extinta compañía petrolera de Pedernales.
Esta fue la iglesia que encontraron los curas capuchinos que llegaron a estudiar la zona con miras a restablecer las misiones, tras un siglo de haber sido destruidas durante la guerra por la independencia del imperio español.
La construcción del templo actual data del año 1928. El sitio escogido por el entonces párroco de Tucupita fue frente a la Plaza Bolívar, pero el terreno era inestable y la obra se hundía, pese a la inversión en materiales para evitarlo. Por ello fue trasladada a la ubicación actual.
Más de una década tomó construir la iglesia
La construcción de la iglesia San José de Tucupita fue ejecutada a lo largo de poco más de una década. De acuerdo con lo descrito por el sacerdote Elías Marín, en 1930 ya estaban listos dos arcos de cada lado y la capilla del presbiterio. Luego se sumaron dos arcos y se levantaron unos cuatro metros de pared lateral en todo el entorno.
La fachada principal y las dos torres fueron construidas entre 1932 y 1939, así como tres arcadas internas, las puertas y ventanas, los colados del presbiterio, las paredes laterales y todo el techo.
De 1939 a 1941, se colocaron el comulgatorio y el órgano, el cuadro de la Última Cena, además de los ventanales a colores. El altar mayor y el techo raso fueron instalados entre 1941 y 1943. El templo quedó concluido un año más tarde con la puesta del piso de granito.
El órgano más grande de Venezuela
Especial mención merece el órgano de tubos de la iglesia San José. Instalado en 1983, en el marco de la celebración del bicentenario del natalicio del Libertador Simón Bolívar, ostentó la distinción de ser el más grande de Venezuela hasta el año 2008.
La historia refiere que el obispo de la época, quien era organista, estuvo adquiriendo materiales de la organería alemana Laukhuff durante 25 años, pero cuando se comenzó a instalar la tubería la madera había sido carcomida por comején, por lo que fue reconstruida con madera de la zona.
Se afirma que los planos para el montaje y la fachada del órgano tubular de la iglesia de San José de Tucupita corresponden a un organero alemán, radicado en Venezuela, de nombre Kurt Schmelzer.
El primer cura de la iglesia San José fue beatificado
En octubre de 2013 los tucupitenses celebraron la beatificación del primer cura interino de la localidad, aunque algunos afirman que fue el primer párroco. Se trata de fray Arcángel de Valdavida, quien llegó a la región deltana en 1919 con la encomienda de refundar misiones capuchinas y terminó al frente de la iglesia San José.
El sacerdote enfermó de paludismo, por lo que solo cumplió sus labores durante tres meses. Fue asesinado por odio a la religión durante la guerra civil española (1936-1939). Por ello fue beatificado como uno de los mártires de la fe de esa contienda.
Entre los personajes destacables en la historia del templo de San José, se encuentra fray Bonifacio de Olea, autor del Ensayo Gramatical del Dialecto de los Indios Guaraúnos. Igual distinción merece el gobernador Samuel Darío Maldonado, médico, antropólogo, escritor, periodista y político, quien encargó y donó, la imagen del Sagrado Corazón de Jesús a la iglesia.
Uno de los lugares de mayor tradición en Delta Amacuro
La Iglesia San José de Tucupita es uno de los lugares más queridos y de mayor tradición del estado Delta Amacuro por compartir su historia y desarrollo con Tucupita, la capital.
Este templo que también es considerado guardián de la fe y espiritualidad de los tucupitenses, así como protector de la ciudad, es visita obligada para las y los interesados en conocer y sentir la historia de la Sultana del Mánamo.
En especial durante las festividades para rendir tributo a San José, patrono de Tucupita desde 1908, cuando una familia devota sacaba la imagen del santo ante cada llegada de los misioneros, de acuerdo a la narración que se le hace a los turistas y la feligresía.
Con información de Cortudelta, Fundación Arquitectura y Ciudad, Hermanos Capuchinos y Venezuela histórica y cultural
Fotos cortesía de Cortudelta, Picuki, Templete, Últimas Noticias, Abebooks, Tanetanae y Wikipedia
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