Mientras investigaciones recientes advierten la posibilidad de vivir en un mundo sin arrecifes de coral, los científicos buscan cómo evitarlo. Sin embargo, si no se reducen rápida y drásticamente las emisiones de CO2 los corales desaparecerán. Un señalamiento en el que coinciden los estudios.
Los científicos pronostican que el 94% de los corales del mundo se erosionarán para 2050, si las emisiones continúan aumentando.
Los mayores impactos que han sufrido los arrecifes de coral “han sido consecuencia de un triple golpe climático: olas de calor marino, acidificación de los océanos y calentamiento general. Hasta ahora se conoce poco sobre cómo afectarán los distintos escenarios climáticos las tasas de crecimiento de los corales.
El nuevo estudio de la Universidad Victoria de Wellington en Nueva Zelanda, titulado “Disminuciones mundiales de la producción de carbonato de calcio en los arrecifes de coral debido a la acidificación y el calentamiento de los océanos”, fue publicado en PNAS.
Los escenarios más extremos tendrían consecuencias catastróficas para la biodiversidad marina y los millones de personas, cuyo sustento depende de corales saludables.
La investigación: 233 lugares en 183 arrecifes de coral
Gráfica del estudio «Disminuciones mundiales de la producción de carbonato de calcio en los arrecifes de coral debido a la acidificación y el calentamiento de los océanos» en PNAS.
Los científicos, liderados por Christopher Cornwall investigador de la Universidad Victoria de Wellington en Nueva Zelanda, analizaron tres futuros climáticos con distintos niveles de emisiones provocadas: bajo, medio o alto.
Para los niveles medio y alto la proyección indica que la mayoría de los arrecifes de coral dejarán de crecer a finales de siglo y, además, se irán erosionando. Aún con un futuro de emisiones bajas, las tasas de crecimiento de los corales se reducirían un 76%.
Gráfica del estudio «Disminuciones mundiales de la producción de carbonato de calcio en los arrecifes de coral debido a la acidificación y el calentamiento de los océanos» en PNAS.
El estudio de 233 du ubicaciones en 183 distintos arrecifes de coral del mundo, con diferente composición de especies y complejidad física, proporcionó la primera estimación cuantitativa de cómo el cambio climático afecta la acumulación de carbonatos y las tasas de crecimiento de los corales.
Para estimar las tasas de producción neta de carbonato de los arrecifes estudiados, los científicos aplicaron un metaanálisis. Encontraron que disminuirán en un 76, 149 y 156%. “Si no cumplimos con este objetivo de escenario de bajas emisiones, los arrecifes de coral están esencialmente condenados”, advirtió Cornwall.
Más emisiones menos crecimiento
Los corales deben crecer continuamente para contrarrestar la erosión causada por las olas, tormentas y el consumo de animales, tales como esponjas, peces loro y erizos de mar. Al respecto, los autores del estudio advierten que el cambio climático puede detener por completo este proceso.
La investigación proporciona proyecciones cuantitativas sobre el impacto de los diferentes factores de estrés del cambio climático, en la producción de carbonato de calcio en los arrecifes de coral de las principales cuencas oceánicas, elemento importante para su crecimiento.
La investigación determinó que la mayoría de los arrecifes de coral no podrán mantener una producción neta positiva de carbonato para el 2100, si no se reducen las emisiones.
Por otro lado, el CO2 reacciona con el agua haciéndola más ácida, lo que a su vez erosiona los arrecifes y dificulta que los corales construyan sus esqueletos. Además, las temperaturas del agua en general más cálidas también reducen las tasas de crecimiento de los arrecifes.
Blanqueamiento de los corales
Hasta ahora los océanos han sido los más afectados por el cambio climático, absorbiendo la gran mayoría del calor causado por los impactos humanos.
En lo que respecta a los arrecifes de coral, las altas temperaturas provocan su blanqueamiento. Esto sucede especialmente en períodos de intenso estrés por calor, cuando los corales expulsan las algas que les proporcionan alimento y sus brillantes colores, dejando blancos sus esqueletos.
Los eventos de blanqueamiento masivo han sido devastadores en lugares como la Gran Barrera de Coral en Australia. De los tres eventos de este tipo que ha experimentado en los últimos cinco años, el más extenso fue en 2020. Causado por un verano de calor extremo, dejó un gran impacto en los corales desde el extremo norte hasta el extremo sur del ecosistema de 2.600 km de largo.
“Es bastante traumático ver estos eventos en persona. Lo que sucede es que sólo una pequeña fracción de ese coral podrá recuperarse de esos eventos, y una gran proporción de ellos, dependiendo del estrés por calor, morirá”, explica Christopher Cornwall.
¿Por qué son importantes los arrecifes de coral?
Más de 830 mil especies albergan los arrecifes de coral, incluyendo una cuarta parte de todas las especies de peces. Además, proporcionan alimentos e ingresos a las comunidades costeras a través de la pesca y el turismo, por lo que millones de personas dependen de ellos.
Tienen un papel importante en la protección de las costas tropicales frente a eventos como las tormentas, pues ayudan a evitar que las marejadas ciclónicas inunden las costas.
La clave de la esperanza de supervivencia de los arrecifes de coral podría estar en Costa Rica. En ese país Joanie Kleypas, experto del Centro Nacional de Investigación Atmosférica de Estados Unidos, estudia especies de coral que podrían soportar un calor o una acidez más altos.
Señales esperanzadoras
El equipo de investigación registró algunos hallazgos esperanzadores: corales que sobrevivieron a importantes eventos de blanqueamiento. “Estuvieron completamente blanqueados durante meses y hubo algo de mortalidad, pero en general, sobrevivieron. Así que tienen algún tipo de secreto”, señaló Kleypas.
Los científicos trabajan en la cría estos corales resistentes que luego podrían emplearse en la restauración de arrecifes. Sin embargo, la investigadora advierte que prevenir la contaminación y la sobrepesca, también son medidas de protección clave.
Los científicos determinaron también, que las estrategias de adaptación de los corales podrían darles más tiempo, si se reducen las emisiones. «Si actuamos lo suficientemente rápido para ejecutar ese plan y reducimos las emisiones de dióxido de carbono, entonces lo haremos; creemos que tenemos la posibilidad de que este sea el camino a seguir para salvar el ecosistema», señala Kleypas.
¿Cómo evitar un mundo sin arrecifes de coral?
Las últimas investigaciones coinciden en señalar la baja probabilidad de que los arrecifes de coral del mundo sobrevivan si continúan las emisiones atmosféricas de CO2.
Para evitar tener que vivir en un mundo sin arrecifes de coral, estas emisiones tendrían que caer a cero antes de 2100. Pero esta acción no basta, es necesario emprender medidas de restauración y adaptación.
La supervivencia de los corales y la preservación de sus beneficios ecológicos, sociales y económicos está en nuestras manos.
Con información de PNAS, The Conversation y Futuro Verde
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