Quimbombó es nombre con el que conocemos en Venezuela al fruto comestible de una planta de origen africano, que llegó a América por el comercio de esclavos siglos atrás. En la actualidad se cultiva en varias regiones tropicales y subtropicales del mundo.
El Quimbombó es muy apreciado en la región Oriental de nuestro país, un ingrediente presente en diversas preparaciones típicas de la cocina local, particularmente en el estado Sucre.
Tiene un sabor particular, muy parecido al de la berenjena. Puede consumirse cruda o cocida de diversas formas, sola o mezclada con distintos tipos de carnes y otras verduras. Incluso, las semillas maduras y tostadas se utilizan para preparar un sucedáneo del café.
Quimbombó, okra, ñajú, candia y quiabo
Clasificada originalmente como una especie del género Hibiscus, el Quimbombó ahora forma parte del género Abelmoschus y pertenece a la familia de las malváceas. Su denominación científica es Abelmoschus esculentus.
Otros nombres comunes con los que se llama a la planta y a su fruto son: Okra (internacionalmente), Quingombó y Ocra (El Salvador), Candía (Colombia), Ñajú (Perú y Panamá), Bamia (Medio Oriente), Molondrón (República Dominicana y Puerto Rico), Gombo (República Dominicana) y Quiabo (Brasil).
Esta herbácea perenne (anual) es valorada por sus propiedades nutricionales y medicinales, contenidas en sus frutos y semillas.
La planta Abelmoschus esculentus
Abelmoschus esculentus es una planta de porte erguido, con un tallo leñoso (robusto) en la base que alcanza una altura de 1,50 metros o 150 centímetros. En las zonas tropicales puede llegar a medir hasta 3 metros. Las ramas del Quimbombó se forman yemas axilares ubicadas en las bases de las hojas que están en el tallo central.
Tiene hojas palmeadas (dividida en muchos lóbulos y dispuestos como los dedos de una mano), que se distribuyen de la siguiente manera: pentalobuladas las superiores, trilobuladas las intermedias y las inferiores, acorazonadas con hendidura en la pared basal y borde festoneado.
Sus flores, grandes y solitarias con breve pecíolo, son de color blanco-amarillento y presenta una mácula púrpura o malva en la base de los pétalos. El fruto con forma cónica y de color verde, es una cápsula polilocular podría alcanzar los 30 centímetros de longitud y los 3,5 centímetros de diámetro en su base. Pueden se lisos o asurcados con numerosas semillas también comestibles.
Propiedades, beneficios y usos
Un bajo aporte calórico pero alto de fibras, es uno de los beneficios que destacan de este alimento de origen vegetal. De sus valores nutricionales resaltan su contenido de provitamina A, vitaminas del grupo B, C, K y E; así como potasio y calcio.
Desde el punto de vista de la medicina alternativa, el Quimbombó tiene algunas aplicaciones. Protege la mucosa digestiva debido a su rico contenido de fibra soluble y mucílagos (emoliente). El agua que queda luego de su cocción es empleada para hacer gárgaras y mejorar afecciones de la garganta.
En líneas generales, se atribuyen propiedades a las hojas (emoliente, anticatarral, diurética, estomacal, vulneraria y abortiva); los frutos (emoliente, reconstituyente y resolutiva; se utiliza para tratar afecciones oculares), y las semillas (antiinflamatoria, antiasmática, antihistérica, antiespasmódica, hepatotropa, sudorífica, afrodisíaca, insecticida y estomáquica).
El tallo de la Abelmoschus esculentus proporciona una fibra parecida al cáñamo que es aprovechada por la industria textil. Mientras que la celulosa es utilizada para la fabricación del papel. Por otra parte, el aceite extraído de las semillas es muy apreciado por la industria del perfume y cosmética. Además, se emplea en las terapias alternativas (aromaterapia) para tratar la depresión y la ansiedad.
Crudo o cocido
Los usos culinarios del Quimbombó son diversos. Puede consumirse cruda en ensaladas y escabeche. Cocida, bien sea hervida, asada, frita, guisada, sola condimentada con limón, vinagre o curri.
También mezclada con otros vegetales (acelgas, tomates, espinacas, cebollas, cilantro, entre otros) y diversos tipos de carnes para preparar sopas y guisos. Deshidratada, agregando el polvo a los platillos.
La sustancia mucilaginosa del fruto es ideal para espesar sopas, cocidos y salsas. Las semillas maduras y tostadas pueden emplearse para preparar un sustituto del café.
Calalú de Paria
Calalú de Paria es un plato de origen afrocaribeño y representativo de esta región del estado Sucre. En esta preparación, el quimbombó es uno de los protagonistas. Este popular guiso se compone de carne de chivo o de gallina, según la preferencia del cocinero, quimbombó, hojas de ocumo o de col y leche de coco.
El quimbombó – previamente lavado y cortado en rodajas – se hierve junto a las hojas de ocumo o de col cortadas en poca agua. Una vez rompe el hervor se le agrega sal, ajo, cebolla, tomate, pimentón y ají dulce bien picado.
La carne elegida es lo último que en agregarse y cocina hasta que esté lista. Minutos antes de retirar el caldero del fuego, se añaden dos tazas de leche de coco.
Con información de Plantas y Flores, Ecured y Ecoportal
Catálogo del Patrimonio Cultural Venezolano 2004-2005. Municipio Mariño, estado Sucre. Instituto de Patrimonio Cultural, 2006. Publicado en Alba Ciudad
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