Inicio Lo Afirmativo Venezolano La vida en contracorriente del Pato de torrentes

La vida en contracorriente del Pato de torrentes

por Haiman El Troudi
0 comentarios
La vida en contracorriente del Pato de torrentes

En Los Andes venezolanos puede sorprendernos una bella vista, la del pato de torrentes, una llamativa e impactante ave que engalana ríos y arroyos de flujo rápido en Mérida, Táchira, Barinas y Lara, donde vive en contracorriente. Ver a estas hermosas parejas de patos, totalmente diferentes el macho de la hembra, no es un espectáculo muy usual, pues además de que estos animales prefieren vivir en zonas aisladas y esconder sus nidos, su existencia ha mermado.

En Venezuela el pato de torrentes está declarado formalmente en la categoría Vulnerable, por lo que se decretó su veda desde 1996.

Esta ave es endémica, exclusiva de América del Sur, y es la única especie de anátido (familia de aves que incluye a los patos, cisnes y gansos) adaptada a vivir en los ríos caudalosos de los altos Andes.

Alta prioridad de conservación

La vida en contracorriente del Pato de torrentes

 

Este pequeño anátido mide entre 38 y 43 centímetros de alto, se distribuye a lo largo de Los Andes entre 1.700 a 3.300 metros de altitud, desde Venezuela hasta Tierra del Fuego (Argentina), siempre en aguas cristalinas, frías, con corrientes rápidas y  lechos pedregosos y accidentados.

Además de pato de torrentes o torrentero es conocido como pato cortacorrientes, oquelosh en lengua de los onas  y jauain-big o wein-bij en la lengua de los yámanas – ambos pueblos originarios del extremo sur de Sur América- pato correntino, pato tortuga, pato forzudo  y pato espolón.

En nuestro país los cálculos estimados hablan de un máximo de 1.500 a 2.000 ejemplares de esta vistosa ave en las montañas de Los Andes, por lo que a escala nacional se le considera un ave con alta prioridad de conservación. Las mayores poblaciones del pato de torrentes se reportan en Chile y Argentina, hay cantidades importantes en Colombia y Ecuador, mientras que en Perú también se le considera Vulnerable.

En el contexto mundial se clasifica en la Categoría de Preocupación menor (BirdLife International 2015) pues la situación de esta especie no es alarmante.

Para toda la vida

La vida en contracorriente del Pato de torrentes

 

Con el nombre científico Merganetta armata, usualmente los patos de torrente están solos o en parejas, pues es monógamo, al escoger una pareja lo hace para toda la vida.

Los sexos se ven diferentes, pero ambos tienen vistoso plumaje, un pico rojo brillante y una espalda rayada. La cabeza del macho es blanca con líneas: negro en la frente, corona y una faja que baja por detrás hasta la base del cuello, otra faja negra por debajo del ojo hasta la garganta, y una franja retro-ocular negra;  los lados del cuello son blancos con una línea negra; mientras que las hembras tienen la cabeza gris y las partes inferiores de color óxido. La coloración del cuerpo del macho varía regionalmente desde negro hasta rayado.

Los elaborados dibujos que adornan el plumaje de los machos buscan atraer a las hembras. Durante el cortejo el macho utiliza diversas posturas: se dobla, bate rápidamente sus alas y levanta agua con sus patas. El cortejo también incluye la comunicación vocal entre machos y hembras. Usualmente durante éste, nadan uno alrededor del otro, entrando y saliendo del agua frecuentemente.

Los patos de los torrentes hacen sus nidos entre las rocas a orillas del río y son casi invisibles. De todos los patos del mundo, éste presenta el periodo de incubación más largo: 45 días. Se reproducen durante la estación seca, cuando los ríos tienen los niveles de agua más bajos, para asegurar la crianza exitosa de los pichones.

Vivir contra la corriente

La vida en contracorriente del Pato de torrentes

 

Este pato andino –sumamente aerodinámico-  nada contracorriente con extraordinaria habilidad y aparentemente sin esfuerzo. Nunca deja los flujos montañosos rápidos, hábitat en el que pocos patos son capaces de vivir debido a su velocidad, siendo el único comparable el pato azul de Nueva Zelanda.

Pequeño y ágil, el pato de torrente se sumerge y nada contra la corriente, permaneciendo muy cerca del fondo de aguas agitadas y pozas, donde busca bajo las rocas y entre las piedras, larvas de insectos y crisálidas.  Su dieta básica incluye pequeños invertebrados, peces pequeños y hasta material vegetal que consigue entre las piedras sumergidas. Las larvas de insectos acuáticos, está entre sus alimentos favoritos.

 

La vida en contracorriente del Pato de torrentes

 

Esta especie posee características únicas que la distinguen del resto de su familia. Su pico, delgado,  está perfectamente adaptado para buscar alimento entre las piedras y las grietas. Su cuerpo es liviano y estilizado en forma de torpedo, mientras la rígida cola le sirve de timón para mantener el equilibrio en las fuertes corrientes de los ríos de montaña. Las patas son palmeadas, muy grandes y ásperas, con garras largas y poderosas, perfectamente adaptadas para aferrarse a las resbaladizas rocas.  Los machos utilizan los espolones de sus patas largas para protegerse de los invasores.

Por sus habilidades en el agua basan su locomoción en la natación, principalmente, usando el vuelo únicamente para desplazarse de una zona a otra del río. Sus pequeños cuerpos y sus patas adaptadas al medio ambiente, les permiten escalar cascadas rápidamente.

Son animales cautelosos que nadan con la mayor parte del cuerpo sumergido para evitar ser detectados. Se acicalan las plumas con mucha regularidad para mantener sus cualidades impermeables.

Estas aves son muy territoriales y sedentarias. Su territorio puede variar entre 700 metros y 3 kilómetros de longitud, dependiendo de la abundancia de alimento que ofrezca el río en el que habiten. Su vida se desenvuelve en un mismo hábitat, en los lechos de los ríos caudalosos, donde se les suele ver descansando o parados en las rocas.

¿Por qué es vulnerable?

La vida en contracorriente del Pato de torrentes

 

En Venezuela la  vulnerabilidad del pato de torrentes podría estar en parte determinada por el límite de su distribución. Se trata de un animal especialista de hábitat y poco tolerante a modificaciones ambientales. Ocupa territorios fijos a lo largo de los torrentes y riachuelos, donde construye sus nidos entre rocas o en barrancos.

En contraparte su población parece bastante estable y su tendencia a vivir en áreas extensas de terreno inaccesibles, actúa como protección natural.

Pero esta especie no emigra, y esa condición territorial también la hace vulnerable a la extinción siendo la intervención de los Andes venezolanos su principal amenaza, pues son sensibles a cambios en el hábitat  y una parte de sus zonas vitales óptimas han desaparecido o se han visto afectadas por factores como la contaminación, alteración de los cauces de los ríos, construcción de presas hidroeléctricas e introducción de especies como truchas y salmones, con quienes debe competir por el alimento.

El pato de torrentes está presente en doce parques nacionales de Mérida y Táchira pero, aunque su veda está establecida desde 1996 en el país, y ha sido objeto de campañas educativas locales y de investigación, se requiere tomar medidas específicas para su protección, que podrían comenzar por estudios poblacionales para evaluar su distribución geográfica.

 

La vida en contracorriente del Pato de torrentes

 

Su estatus de conservación actual es incierto, justamente debido a la poca información biológica y ecológica disponible, sin embargo, ha sido clasificado como «Vulnerable» de extinción en Venezuela según el Libro Rojo de la Fauna de Venezuela.

Aunque se conoce poco de sus depredadores naturales, que se cree pueden ser peces grandes que se comen a crías jóvenes, se sabe a ciencia cierta que la mayor amenaza sobre esta extraordinaria ave es el propio ser humano y la afectación que hace sobre su medio ambiente natural.

Se hace evidente entonces que la conservación del pato de los torrentes, característico de nuestras montañas andinas, queda completamente en nuestras manos. Es necesario reconocer la importancia de esta especie e iniciar acciones para concienciar sobre su cuidado, asumamos nuestra responsabilidad para proteger al pato de torrentes, único de Sur América y muestra de lo afirmativo venezolano.

 

Con información de Provita, Andígena, DeanimaliaEbird.org  Patrimonionatural


No te pierdas

Oso frontino: especie única en peligro de extinción

La tonina del Orinoco es el cétaceo de agua dulce más grande del mundo

La tortuga arrau un regalo de la naturaleza en peligro

El felino más grande de América podría desaparecer

Deje un Comentario

@Copyright 2018-2024 | Haiman El Troudi | Todos los derechos reservados.

Si continuas navegando en esta web, aceptas el uso de las cookies Acepto Leer Más

Política de Cookies y Privacidad