Con la estrategia de emplazar al ejército republicano en un terreno montañoso, el general patriota Santiago Mariño anuló a la poderosa caballería del despiadado José Tomás Boves para derrotarlo en la Batalla de Bocachica, combate efectuado el 31 de marzo de 1814.
Bocachica, población del actual estado Aragua, fue el sitio seleccionado por el héroe oriental para enfrentar a Boves debido a que sus pequeñas lomas en la parte más cerrada del valle ofrecían las condiciones ideales para desplegar parte del ataque, al tiempo de constituirse en una barrera contra el avance de las superiores fuerzas de caballería realistas.
Mariño, quien decidió acudir al llamado del Libertador Simón Bolívar a unir los ejércitos patriotas del occidente y del oriente venezolano para derrotar a las fuerzas imperiales, ya había reforzado a su hueste con jinetes de los llanos orientales ante la nueva táctica de anteponer las cargas de caballería a los movimientos de infantería.
Objetivo principal: barrer los llanos de las fuerzas realistas
Fue a mediados de enero de 1814 cuando Santiago Mariño salió de Aragua de Barcelona rumbo al occidente venezolano para auxiliar a sus aliados republicanos, con el objetivo principal de barrer los llanos de las fuerzas realistas y evitar que se extendieran a las provincias orientales que estaban prácticamente desguarnecidas.
Otro de sus propósitos era limpiar el llano guariqueño que era el surtidor de bestias, hombres y ganado (comida) para los defensores de la corona española; asegurar las comunicaciones, empujar las tropas enemigas hacia los Valles de Aragua y atraparlas entre dos fuegos.
Enterado del avance de Mariño con su ejército, Boves quien había sido vencido en San Mateo por Bolívar, decidió ir a enfrentar al héroe margariteño. Éste, para evitar ser interceptado por el español en La Puerta, donde ya había vencido a los patriotas, se ubicó en Bocachica, hábil maniobra que le dio la ventaja de contar con lomas muy empinadas.
Mariño organizó sus fuerzas en lo más angosto del valle
De cara a la batalla, Mariño organizó sus fuerzas, de unos 4.000 hombres, donde el valle era más angosto. La mañana del 31 de marzo, envió a Mariano Montilla como señuelo por el camino de Villa de Cura con un escuadrón de caballería y dos compañías de cazadores.
Cerca del mediodía estos fueron asaltados por fuerzas realistas, conformadas también por alrededor de 4.000 hombres, por lo que se replegó hacia la línea de batalla. Boves atacó para tratar de cortarle la retirada, pero lo enfrentó el mayor José Antonio Anzoátegui, con el resto del batallón Barlovento.
La lucha fue signada por las constantes acometidas de la caballería realista, repelidas con ahínco por la artillería patriota presente en la Batalla de Bocachica. Tras una primera retirada, Boves volvió al ataque con su caballería, esta vez contra el ala izquierda republicana donde se encontraba Mariño.
Mariño se anticipó a táctica de Boves
Anticipándose a las intenciones de Boves, el general Mariño había mandado a 200 hombres de la infantería a una quebrada cuyo único acceso era muy empinado y estrecho, lo que impidió el avance de la caballería española. Esto, sumado al fuego del destacamento, logró que los realistas huyeran perseguidos por la caballería patriota.
Pero el español renovó sus ataques con más fuerza a eso de las 5:00 p.m. por lo que Mariño ordenó a Valdés lanzarse contra el centro realista, en columna cerrada, tanto al ala izquierda íntegra como a la reserva, que estaba compuesta por indios Guaiqueríes y Chaimas armados con macanas, arcos y flechas.
A pesar de la épica lucha, las tropas de Boves tuvieron que huir en diferentes direcciones porque se agotaron sus municiones. En poder de los patriotas quedó la artillería, gran cantidad de fusiles y caballos. Se estima que en ocho horas de batalla murieron entre 500 y 800 realistas y unos 200 patriotas.
“Soldados la lucha con los tiranos españoles europeos aún no se ha concluido (…) ¡soldados! ¡a las armas! Es preciso destruir a los tiranos o dejar de existir”, fue parte de la arenga con la que el general Santiago Mariño inspiró a sus fuerzas libertadoras para vencer a los españoles. La victoria de la Batalla de Bocahica contribuyó a retrasar el ataque de Boves a Caracas, gracias a lo cual gran parte del pueblo tuvo tiempo para huir a Barcelona.
Con información de Centro Regional de Investigación y Formación Permanente del Magisterio Aragueño “Simón Rodríguez”, Registro de Patrimonio Cultural Venezolano y Efemérides Venezolanas
Fotos cortesía de Alba Ciudad y Wikipedia
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