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Parque Nacional Dinira, fuente de savia y vida

por Haiman El Troudi
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Parque Nacional Dinira, fuente de savia y vida

En la Cordillera de los Andes, en medio de un paisaje de lomas, montañas escarpadas, bosques de galerías, terrazas y ríos caudalosos teñidos de color vino con mucha espuma blanca, se encuentra el Parque Nacional Dinira, fuente de savia y vida.

Su nombre deviene del vocablo arawaco “Dinta” que significa “teta que da leche”. Denominación que hace referencia a la espuma densa y blanca que se forma cuando el agua del río, siguiendo su curso, choca contra las piedras. Otra interpretación refiere que Dinira proviene de un vocablo indígena que significa “lomas con forma de senos”, en alusión a que en sus bosques mana la savia para la vida.

Parque Nacional Dinira, fuente de savia y vida

Este hermoso parque con una extensión de 45.328 hectáreas, ubicado entre los estados Lara, Trujillo y Portuguesa, es considerado el de mayor extensión en la región centrooccidental del país.

Creado en 1988, mediante el decreto 2.564, para proteger la cuenca alta del Río Tocuyo, el cual desemboca en el Mar Caribe, también es guardián de la cuenca alta de los ríos Chabasquén y Boconó, que drenan hacia los llanos Occidentales, así como la cuenca del río Carache, que vierte sus aguas en el Lago de Maracaibo.

Cuatro tipos de vegetación

Parque Nacional Dinira, fuente de savia y vida

Con un clima que oscila entre los 6 y 22 grados centígrados, en el Parque Nacional Dinira conviven cuatro tipos de vegetación: páramos, sabanas, bosques y plantaciones forestales. En estas últimas se pueden observar especies como el Eucalipto, las Acacias y pinos de los tipos Radiata y Caribea.

Parajes prístinos, en los que la neblina abraza la montaña, albergan 42 especies de árboles de copas grandes, entre los que destacan el Araguaney (Tabebuia chrysantha), la Sloanea caribaea y el Zanthoxylum ocumarense.

Los páramos, presentes en la zona del parque ubicada en el estado Lara, ocupan el 5% del parque con alturas que varían entre los 2.600 y 3.600 metros sobre el nivel del mar, siendo el más importante el Páramo de Cendé, el punto más elevado del parque en el que imperan los frailejones.

Santuario para la biodiversidad animal

Parque Nacional Dinira, fuente de savia y vida

Gracias a su vegetación característica del bosque submontano y montano siempreverde, así como a la cantidad de fuentes hídricas que en él se encuentran, representa un santuario para el desarrollo de la biodiversidad animal.

El Parque Nacional Dinira es guardián de especies en peligro de extinción, entre las que destacan el oso frontino o andino, el jaguar o tigre americano y el venado matacán, cuya caza ha sido vedada en territorio venezolano. Estos conviven con otros mamíferos como los simpáticos monos capuchinos, los dulces osos mieleros, zorros, dantas, cuchicuchis, picures, puercos espines, mapurites, rabipelaos y báquiros cinchados.

El silencio y la soledad del paisaje solo se ve interrumpido por el sonido cantarino de las diversas bandadas de tucusitos, paujís copete de piedra, cristofués, esmeraldas coliverde, pericos de ojo blanco, lechuzas orejudas, cardenalitos, guacharacas y carpinteros copete rojo, que han hecho del parque su hogar.

Zona vulnerable

Parque Nacional Dinira, fuente de savia y vida

Dinira se encuentra en una región con vías de penetración accidentadas de poco mantenimiento, lo que aunado a la poca intervención humana ha contribuido a su preservación. No obstante, se considera una zona vulnerable por problemas vinculados a la falta de un Plan de Ordenamiento y Reglamento de Uso y de personal que administre y controle los espacios.

Asegurar la administración y control del Parque Nacional Dinira es indispensable para la preservación de numerosas especies de flora y fauna, algunas consideradas únicas y en peligro de extinción.

Por otra parte, el cuidado de las cuencas hidrográficas permitirá el suministro continuo a las poblaciones aledañas, así como el desarrollo agropecuario de la región centro occidental, de importancia estratégica para el país.

Para los amantes de la aventura

Parque Nacional Dinira, fuente de savia y vida

El Parque Nacional Dinira es un compendio de fascinantes paisajes vírgenes de montaña en la que los amantes de la aventura en espacios naturales, pueden disfrutar de diferentes actividades recreativas y deportivas.

Los atractivos turísticos por excelencia son la Cascada El Vino y la Cueva de la Peonía, pero para aquellos a los que les gusta explorar encontrarán tesoros como las quebradas de Las Minas y Buenos Aires, el Páramo de Cendé, la Laguna de Nunca Jamás, la Cavernas de las Arañas, el Altar, la Chorrera, la Llanura de la Fila de las Rosas, además de los páramos los Nepes y las Rosas.

Pero si lo que gusta es disfrutar de la vida silvestre, encontrará mil bondades escénicas en cada árbol vestido con barba de palo, en cada piedra cubierta de musgo, en las orquídeas autóctonas, en la bruma que abraza la tarde y en la espuma blanca que golpea las rocas del Dinira.

 

Con información de UCV, IVenezuela, Ecured, Minec, Parkswatch y Wikiwand

Fotos cortesía de Minec, Ecoturismo Lara, IVenezuela, Flickr, Wikimedia y Steemit


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