Al atravesar la sabana de los llanos centrales venezolanos se puede disfrutar del grandioso espectáculo visual representado por la Palma Llanera, considerada una especie indomable, porque desafía las inclementes condiciones climáticas de esta región al sobrevivir seis meses bajo el agua y seis meses en sequía.
El árbol emblemático del estado Guárico posee el nombre científico de Copernicia tectorum. La también llamada palma de abanico, palma de sombrero o palma redonda, es un miembro de la familia Arecaceae, originaria de Venezuela y Colombia.
El género recibe este nombre en honor al astrónomo polaco Nicolás Copérnico, mientras que el epíteto tectorum hace referencia a uno de sus usos, ya que sus hojas sirven para hacer los techos de las casas del campo.
Reina del Llano
De porte imponente, la Palma Llanera mide de seis a doce metros de altura. La forma palmada de sus hojas extendidas y agrupadas en el ápice del tallo, con un estilo en forma de corona, le dan un aire majestuoso por lo que muchos la consideran la Reina del Llano.
Esta especie ostenta un tallo alto, liso y no ramificado en la parte inferior. En la superior, éste luce de forma escalonada debido a los cortes dejados por las ramas muertas que se han desprendido en el camino.
Sus semillas tardan diez meses en germinar y en sus primeros años de vida, el crecimiento de sus raíces profundas en la búsqueda de los depósitos de agua del subsuelo, es superior al de su tronco, que luego asciende muy rápidamente.
La Palma Llanera, cuyas flores son hermafroditas, florece de febrero a marzo. Sus frutos, de color verde amarillento con forma de aceituna, contienen una sola semilla que, al no tener muchos nutrientes, son usados como forraje para el ganado.
Fuente que preserva la vida
Este extraordinario árbol es de vital importancia para resguardar el agua acumulada en los Esteros durante los meses de lluvia y su conservación hasta la época de sequía, convirtiéndose en fuente que preserva la vida del ganado y la fauna silvestre de la zona que, bajo su sombra, obtiene alimento y protección.
Es una de las plantas mejor adaptada a los cambios radicales de los espacios que ocupa. En ellos, la Palma Llanera se agrupa para formar los llamativos y extensos Palmares, tan comunes en el sur del estado Guárico. Un paisaje inigualable que destaca en el horizonte por su esbeltez y hermosura.
La Copernicia tectorum habita en suelos que están cubiertos de hierbas acuáticas y gramíneas solitarias que, al igual que ella, son tolerantes a las inundaciones del llano.
Muy útil para el llanero
La vida en el llano es dura y la Palma Llanera es de gran utilidad para el llanero ya que aporta materiales para diferentes usos que favorecen sus condiciones de vida.
En el área de la construcción, sus resistentes tallos son utilizados como columnas en la edificación de las viviendas y caneyes, así como en la elaboración de los falsos de las puertas que protegen las entradas y los estantillos que delimitan los corrales.
Sus hojas ya secas y maduras se emplean para techar las casas; mientras que las fibras de las tiernas se usan para confeccionar alfombras, sombreros, sacos, carteras, cestas y mochilas de forma artesanal, convirtiéndose en un importante factor económico para los artesanos del lugar.
Fuente de Inspiración
Ha sido fuente de inspiración en las diversas manifestaciones culturales del llanero, a través de las cuales cuentan sus historias y leyendas, transmiten enseñanzas de sus costumbres y faenas.
AL ritmo de arpa, cuatro y maracas, a través del joropo como la máxima expresión musical del llano, el ya fallecido cantautor guariqueño Ángel Custodio Loyola rindió tributo a la Palma Llanera en los versos de su famosa canción El Pajarillo:
“Pajarillo, Pajarillo que ayer tarde
volabas en tu rivera
como no vuelas ahora
que viene la primavera
me dijiste que eras firme,
como la palma llanera
si la palma fuera firme,
no la quema la candela
no la tramoleara el viento,
como a la soga el llanero”
Algunos exponentes del género de la poesía también se han inspirado en esta planta para dar forma a sus versos, como Alfonso García Ceballos en Árboles de mi Patria:
“Yo soy la palma Llanera
Que a Guárico represento,
Y para mí este momento
Es ocasión placentera.
En la industria sombrerera
Mi hoja, es materia prima,
Busca en mí la rima
Todo poeta llanero, y
Doy abrigo en el estero”
Con información de Ciudad Verde, Vida Agro y Monaco Nature Encyclopedia
Márquez, Patria y Rangel, Heryck. “Árboles Nuestros”. Edición Digital, 2020.
Fotos cortesía de Steemit y Palmedia
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