Los tepuyes son las formaciones sedimentarias más antiguas del planeta en las cuales se encuentran rasgos y evidencias representativas de la evolución de la vida en la Tierra, y en Venezuela es donde se encuentra la mayor cantidad de ellos.
Estas ancestrales formaciones con data del período Precámbrico encuentran su máxima expresión sobre el planeta en una región comprendida entre el Macizo Guayanés y la Amazonía venezolana, a la cual se conoce como región del Pantepuy. Y, aunque se encuentran en menor proporción en Brasil, Guyana, Surinam, la Guayana Francesa y Colombia, solo en Venezuela existen más de cien tepuyes en la Gran Sabana del sureste, en el borde con Guyana y Brasil.
Estas formaciones macizas y escarpadas, con una superficie generalmente aplanada y de paredes verticales, suelen estar aisladas por lo que sustentan una diversidad de flora y fauna con especies únicas en el mundo, la mayoría de ellas desconocidas.
Morada de los dioses

Roraima Tepuy
La palabra tepuy proviene de una voz de la lengua indígena pemón que significa montaña, pero otras fuentes la traducen como “morada de los dioses”. Se trata de unas mesetas verticales especialmente abruptas, de roca muy antigua que se elevan sobre la selva amazónica y el Escudo Guayanés.
Los tepuyes tienen una superficie generalmente aplanada y paredes verticales, resultantes de una intensa actividad erosiva sobre planicies muy antiguas que corresponden y caracterizan al Escudo Guayanés. Están constituidas por rocas sedimentarias, especialmente cuarcitas, areniscas y granitos, con algunos lechos delgados de pizarra, muy densas del Grupo Roraima. Además, también se encuentran, en la mayoría de estas montañas, rocas intrusivas magmáticas, como diabasas y, en menor grado, granitos. Casi todas las cumbres de los tepuyes exhiben lajas y superficies más o menos extensas de roca desnuda.

Largarto acorazado. Fotografía de Fernando Rojas-Runjaic.
Investigaciones documentadas señalan que desde el punto de vista geológico se trata de las estructuras emergidas más antiguas del planeta, provenientes concretamente del precámbrico.
Tienden a estar individualmente aislados sin formar parte de una cadena común. Esta característica convierte a los tepuyes en el ambiente propicio para el desarrollo de formas evolutivas únicas, presentando especies endémicas de flora y fauna, entre ellas las plantas carnívoras, las ranas arlequín, los colibríes esmeralda y el lagarto acorazado.
Venezuela cuna de tepuyes
En Venezuela, donde abundan los tepuyes, existen unas 115 de estas antiguas formaciones repartidas en los estados Bolívar y Amazonas, principalmente en la zona de la Gran Sabana. Otro número importante de ellos se encuentra en el Parque Nacional Canaima que ha sido reconocido como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Por otra parte, en Colombia se encuentran formaciones de este tipo en la Serranía de La Macarena, Sierra del Naquén y la Serranía de Chibiriqueta. La Serranía de La Macarena es una región que comprende un sistema biogeográfico, un punto de encuentro, en el que coinciden los sistemas andino, orinocense y amazónico, la cual también fue declarada Patrimonio de la Humanidad.
No todos son de fácil acceso, muchos aún se mantienen inexplorados. Usualmente superan los 1.000 metros de desnivel con respecto a la jungla circundante. En la cima de estas estructuras la erosión ha creado extrañas formaciones laberínticas. Además, nacen en ellas importantes ríos y gigantescas cascadas, siendo quizás la más conocida la que desde el río Kerepacupai, en la cima del Auyantepuy, se desprende por sus paredes formando, la cascada más alta del mundo.
Dada la fragilidad de sus ecosistemas, el acceso a los tepuyes es restringido y se requiere autorización especial. Sin embargo, se puede llegar a sus cercanías. A los que se encuentran en el estado Amazonas solo se llega por vía fluvial, siguiendo los cauces de los ríos adyacentes. Los que se encuentran en el estado Bolívar, en la Gran Sabana, tienen acceso a través de la carretera que lleva desde Puerto Ordaz a Santa Elena de Uairén, y también por vía fluvial.
Escudo Guayanés
El Escudo Guayanés es una región geográfica que se ubica en la parte noreste de la América del Sur. Abarca la totalidad de los estados Bolívar y Amazonas, en Venezuela, y se extiende hasta el estado brasileño de Roraima; ocupa gran parte del territorio de Guyana, Surinam y la Guayana Francesa, así como una pequeña porción de Colombia.
Está constituido por un basamento rocoso muy antiguo, principalmente de granito y gneises de hasta 3.600 millones de años de antigüedad, con una cobertura sedimentaria también muy antigua y de gran espesor, formada por areniscas y cuarcitas muy resistentes a la erosión. Tales sedimentos se depositaron en un ambiente de aguas someras, lacustres o marinas, como lo sugieren las inconfundibles marcas de rizaduras que se observan sobre ciertas rocas expuestas en la superficie de algunos tepuyes.

Piedra del Cocuy, estado Amazonas.
Millones de años de continua exposición a los diferentes agentes erosivos desgastaron profundamente las rocas de éstos antiguos depósitos hasta alcanzar el modelado actual, en donde la presencia de gigantescos promontorios aislados, separados por amplias llanuras surcadas de caudalosos ríos, constituyen la característica más visible de la región.
Los tepuyes vienen a ser los restos de aquellos antiguos depósitos sedimentarios, constituyendo las partes más resistentes o menos expuestas a la constante acción erosiva del agua.
Hogar de especies únicas
El tope de las mesetas está casi completamente aislado de la selva circundante dando lugar formas evolutivas únicas tanto flora como fauna.
Por un lado, la altitud causa una importante diferencia climática con las llanuras más bajas: este clima es típicamente intertropical, con elevadas temperatura y humedad, mientras que la planicie superior puede llegar a ser aún más lluviosa pero mucho más fresca. Por otro lado, la extrema verticalidad de las paredes, la presencia de cornisas insalvables y la humedad de las rocas dificulta bastante la migración entre la base y la cima y viceversa. Son todos estos factores los que han determinado la aparición de flora y fauna endémicas. Debido a esta característica, los tepuyes son habitualmente apodados «las Galápagos de tierra firme«.
Además, dada la imposibilidad de acumulación de humus debido al viento y la accidentada constitución del terreno, el suelo de estas mesetas es pobre en nutrientes, lo que ha generado una variedad particularmente acentuada de plantas carnívoras.
En el estrato superior de los extensos bosques del piedemonte crecen numerosas especies de orquidáceas y bromeliáceas. Estas características dan a las mesetas un marcado interés para los biólogos evolucionistas; numerosas especies todavía no han sido clasificadas, y probablemente queden aún muchas por descubrir. En particular, algunos tepuyes están perennemente cubiertos por gruesas capas de nubes, como sucede en el Pico de la Neblina, y sólo han sido fotografiados por radar desde helicópteros. Algunas de estas formaciones aún no han sido tocadas por el hombre.
Ecosistemas y amenazas
Debido a sus características únicas, en los tepuyes se pueden encontrar ecosistemas también únicos, con una vegetación sumamente peculiar como herbazales formados por curiosas hierbas de hojas anchas y alargadas o por bromelias tubiformes terrestres; arbustales semejantes a alcachofas gigantes, o bosquecillos enanos con copas muy densas bajo las cuales se extienden grandes colonias de bromelias terrestres gigantes de hasta 2 metros de diámetro. Así como la distintiva vegetación saxícola o vegetación sobre rocas.
Una vegetación extremadamente rica en endemismos, estimándose en unas 1.500 especies de plantas vasculares. Los mayores centros de endemismo se encuentran en el cerro La Neblina, en el Macizo del Chimantá y en el Macizo Duida-Marahuaca.
Se considera que en estos tipos de vegetación la intervención es baja, salvo por los efectos locales observados en los tepuyes más visitados por turistas, o por los daños causados por el arribo de grupos en helicópteros o avionetas. Entre los efectos negativos más comunes está la disposición de basura, recipientes de combustible y otros enseres abandonados irresponsablemente por los visitantes en los campamentos temporales.

Sapito Rugoso de Ilú
Por otra parte, los cambios climáticos globales podrían representar una amenaza futura mayor, debido al pequeño intervalo de tolerancia de las especies que los integran ante variaciones de humedad y temperatura. Este daño, aunque limitado a localidades relativamente pequeñas, es casi irreversible, pues se ha documentado que la vegetación afectada se recupera muy lentamente, dada su fragilidad y la pobreza de los suelos
En tepuyes como Roraima, Auyantepui, Autana y Kukenán, se aprecia el deterioro de la vegetación saxícola, en especial en la zona de acampado, producto del pisoteo de los turistas. Adicionalmente se ha reportado la extracción ilegal de plantas carnívoras.
Los tepuyes más conocidos

Tepuy Kukeman
Entre los tepuyes más conocidos se encuentran el Autana, el Pico da Neblina, el más alto de todos, ubicado en la frontera entre Venezuela y Brasil, es además el punto más elevado en ese país, el Auyantepuy, el Roraima, el Kukenan, desde donde cae la 2da o 10ma. catarata más alta del mundo, Salto Kukenan y Sarisariñama, con la fosa de hundimiento más grande del mundo.
Autanatepui
El Autanatepui, llamado árbol de la vida en lengua piaroa, sobresale 1300 metros sobre el suelo selvático. En su superficie se observan enormes hoyos de unos 400 metros de profundidad. Se ha sugerido que podría tratarse de cavernas cuyas bóvedas colapsaron. Contiene una abertura muy angosta pero que atraviesa el tepuy por su parte más angosta.
Está en el estado Amazonas, cerca de la frontera con Colombia.
Auyantepui
Con una superficie de 700 kilómetros cuadrados y una altitud de 2.450 msnm es el más extenso del estado Bolívar. Desde su cima se precipita la cascada más alta del mundo: el Churún Merú o Salto Angel. Este tepuy presenta una diversidad de ambientes, con valles, ríos, selvas y montañas internas que lo dividen. Su nombre significa “montaña del diablo”.
Neblinatepui
El más alto de todos los tepuyes, también es conocido como el Pico da Neblina se encuentra en medio de la selva Amazónica. Su nombre se debe a la nubosidad y continúas lluvias que mantienen en el área una gran humedad. Por ser una zona limítrofe entre Brasil y Venezuela está sujeto a acuerdos internacionales que establecen que los sectores que drenan sus aguas hacia los ríos Orinoco y Casiquiare pertenecen a Venezuela y los que drenan hacía el río Amazonas pertenecen a Brasil.
Esto origina que el Pico La Neblina está en territorio brasilero y sus 3.040 metros constituyen la mayor altura de ese país. Ambos países han decretado Parques Nacionales en la zona que sumados alcanzan una superficie de 3.600.000 ha. En el lado brasilero se le llama Parque Nacional Pico da Neblina y del lado venezolano Parque Nacional Serranía La Neblina.
La superficie del Cerro La Neblina muestra profundos valles y picos agudos, teniendo a lo largo de su eje principal un valle conocido como el Cañón del río Baria, uno de los más profundos del mundo. Su vegetación es típica del lugar y se estima que más del 50 % de las especies encontradas en su cumbre son endémicas.
Ptaritepui
Ubicado en el estado Bolívar, sus paredes rocosas son tan abruptas que se supone que un número particularmente elevado de nuevas especies podría ser encontrado allí.
Roraima-tepui
También conocido como monte Roraima es el tepuy más alto, con 2.810 m.s.n.m., con acantilados de 400 metros de altura por todos sus lados. Los indígenas lo llaman Roroima, “el gran verde azulado”. Es uno de los tepuyes de más fácil acceso por una rampa natural, y por lo tanto uno de los más visitado.
El territorio de este tepuy es compartido por Brasil, el Territorio en Reclamación y Venezuela, siendo este último al que pertenece casi el 85 % del tepuy. Un reporte de Robert Hermann Schomburgk, famoso investigador y explorador de Sudamérica inspiró al autor inglés Arthur Conan Doyle para su novela El Mundo Perdido.
Sarisariñama
Situada en el Parque Nacional Jaua-Sarisariñama en el extremo sureste del estado Bolívar, destaca por sus cimas casi perfectamente circulares que son un misterio para los geólogos.
Kukenan-tepui
Es considerada una montaña sagrada por tribus y nativos que viven en esta zona. Desde 1997 no puede ser escalada.
Más de 100 tepuyes existen en Venezuela

Chimantá
La lista es extensa pues nuestro país es el único que cuenta con más de un centenar de tepuyes, muchos de ellos aún inexplorados.
Solo el Monumento Natural Los Tepuyes posee una superficie de 1.069.820 hectáreas e incluye 25, de los cuales 10 se encuentran en el estado Bolívar y 15 en Amazonas.

Upuigma
Esta área protegida, administrada por el Instituto Nacional de Parques (Inparques), organismo adscrito al Ministerio del Poder Popular para Ecosocialismo, fue declarado el 02 de noviembre de 1990, bajo el decreto No. 1.233 del año 1990.
A continuación, compartimos una lista con algunos de los tepuyes que se encuentran en tierras venezolanas.
Denominación | Ubicación | Protección | Altitud (msnm) |
Acopán | Estado Bolívar | Parque Nacional Canaima | 2.112 |
Angasiná | Estado Bolívar | Parque Nacional Canaima | 2.250 |
Aparamán | Estado Bolívar | Parque Nacional Canaima | 2.100 |
Aprada | Estado Bolívar | Parque Nacional Canaima | 2.500 |
Cerro Aracamuni | Estado Amazonas | Parque Nacional Serranía La Neblina | 1.600 |
Araopán | Estado Bolívar | Parque Nacional Canaima | 2.450 |
Autana | Estado Amazonas | Declarado Monumento Natural en 1978 | 1.250 |
Auyantepui | Estado Bolívar | Parque Nacional Canaima | 2.535 |
Carrao Carro-tepui o Karrao | Estado Bolívar | Parque Nacional Canaima | 2.200 |
Cerro Avispa | Amazonas | Parque Nacional Serranía La Neblina | 1.600 |
Cerro Marahuaca | Amazonas | Parque Nacional Duida – Marahuaca | 2.289 |
Chirikayen (Lugar de los Perico) y llamado el Gigante acostado | Estado Bolívar | Parque Nacional Canaima | 1.650 |
Chimantá tepui | Estado Bolivar | Parque Nacional Canaima | 2.550 |
Cerro Huachamacare o tepuy Huachamakari | Estado Amazonas | Parque Nacional Cerro Duida-Marahuaca | 1.770 |
Ilú Tepui | Estado Bolívar | Parque Nacional Canaima | 2.700 |
Cerro Jaua | Estado Bolívar | Parque Nacional Jaua- Sarisariñama | 2.395 |
Karaurín Tepuy | Estado Bolívar | Declarado Monumento Natural | 2.500 |
Macizo Parú Euaja | Estado Amazonas | Declarado Monumento Natural | 2.200 |
Neblinatepui o Pico da Neblina | Venezuela y Brasil | Parque Nacional Serranía La Neblina | 2.994 |
Piedra del Cocuy | Estado Amazonas | Declarado Monumento Natural | 400 |
Ptarí también llamado cerro Budare | Estado Bolívar | Parque Nacional Canaima | 2.400 |
Sarisariñama | Estado Bolívar | Parque Nacional Jaua- Sarisariñama | 2.300 |
Sororopán | Estado Bolívar | Parque Nacional Canaima | 2.050 |
Cerro Tamacuarí-Serranía
Tapirapecó |
Estado Amazonas | Parque Nacional Parima- | 2.300 |
Tepuy Kukemán | Estado Bolívar | Parque Nacional Canaima | 2.680 |
Tepuy Yuruaní | Estado Bolívar | Parque Nacional Canaima | 2,350 |
Tramen Tepui | Estado Bolívar | Parque Nacional Canaima | 2.700 |
Uei ( tepuy ) | Venezuela y Brasil | Declarado Monumento Natural | 2.150 |
Upuigma | Estado Bolívar | Parque Nacional Canaima | 2.100 |
Wadakapiapué o Tepuy Wadakapiapo | Estado Bolívar | Parque Nacional Canaima | 2.000 |
Cerro Yavi | Estado Amazonas | Declarado Monumento Natural | 2.300 |
Con información de Sistema Venezolano de Información sobre Diversidad Biológica, Ladera Sur y Ecured
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