En el estado Aragua, muy cerca de su capital, Maracay, se encuentran varios pueblos de costa y tambor. Localidades donde la playa y la música vibran para ofrecer al visitante, el verdadero ritmo, calor y color del trópico venezolano.
Cata, Catica y Cuyagua, además de El Playón y Bahía de Turiamo constituyen unos escenarios paradisiacos en los que el mar y la alegría se conjugan.
Parte de la belleza de estas localidades está determinada por la biodiversidad que caracteriza al municipio Ocumare de la Costa de Oro, inmerso entre las montañas del Parque Nacional Henri Pittier y las playas y bahías de aguas cristalinas y cálidas temperaturas. Son pueblos de costa en los que repica el tambor, representantes sin duda de lo afirmativo venezolano.
La hermosa Bahía de Cata
Cata y Catica, una al frente de la otra.
Poco después de pasar Ocumare de la Costa se llega a una de las playas más conocidas de la costa de Aragua y de toda Venezuela: la Bahía de Cata. Está rodeada por altas palmeras que le otorgan un encanto particular.
La playa tiene bastantes olas, sobre todo en su lado izquierdo, en donde llegan directamente. Al final de la bahía está la desembocadura del río Cata. Esta bahía es la preferida muchos por sus aguas cristalinas y profundas, impactantes acantilados y sus arenas blancas. Como balneario cuenta con todos los servicios, venta de comidas y estacionamiento. Incluso tiene infraestructura para hospedarse como cabañas y hoteles. Para llegar hasta allí solo hay que atravesar el pueblo.
Antiguamente, la playa se dividía en una parte pública y otra privada. Aunque no se mantienen exactamente así, continúa una especie de división en la costa de acuerdo a los servicios que ofrece, los cuales suelen ser más costosos en la parte de la playa que correspondía antes a la privada.
Pero si se está en búsqueda de más tranquilidad, solo hay que dirigirse al embarcadero que está en el extremo izquierdo de Cata para ir a Catita, otra playa en la misma bahía.
Catita
Catita está en el extremo noreste de la Bahía de Cata. Es otra hermosa playa de aguas cristalinas, pero muy tranquila, sin olas, agradable e ideal para ir en familia con los niños pues no es peligrosa.
Al final de la playa se encuentran unas rocas que se pueden escalar para tener la vista de un mar abierto de un color azul profundo.
Otro dato importante es que cuenta con servicios de toldos y sillas, pero solo tiene un puesto de comida. Se puede llegar allí saliendo desde el Balneario de Cata, o caminando a través de la montaña.
Cuyagua
Cruzando la montaña que está detrás de la Bahía de Cata, se llega a uno de los pueblos más interesantes de la costa Aragueña: Cuyagua. En esta apacible población, ubicada a 10 kilómetros de Ocumare de la Costa, se siente el calor de sus habitantes y el amor con el que la mantienen.
Es un poblado con coloridas casas y gente hospitalaria y cordial. Sus calles y distribución remontan a la época colonial del país. Al igual que otros centros poblados de Venezuela, cuenta con una Plaza Bolívar y a su alrededor se encuentran la Iglesia Católica y las edificaciones donde funciona el Consejo, la Alcaldía, la Prefectura, la Policía y el puesto de salud. La Iglesia está dedicada a la Inmaculada Concepción y al lado venden unos famosos «besitos de coco».
Al final del pueblo se localiza en el río Cuyagua, la poza de arena con sus cristalinas aguas. El lugar está limpio, bien cuidado y tiene facilidades para hacer parrillas y disfrutar de un rico baño.
El río conecta con el mar en la famosa boca, donde se puede observar la faena de los pescadores en sus lanchas. En la zona es común ver a turistas y lugareños preparando el famoso sancocho de rigor con pescado.
La playa de Cuyagua
A un par de kilómetros del pueblo está la playa de Cuyagua. Se le llega bordeando el río en donde hay muchos lugares para acampar. Los cocoteros de la playa permiten que se pueda colocar carpas. También hay un restaurant con servicio de toldos y comida.
La playa de Cuyagua, hermosa bahía de aguas cristalinas, ofrece una gran extensión de arenas blancas y está rodeada de montañas. La caracterizan sus grandes olas, ideales para la práctica del surf y del bodyboard, por ello es muy frecuentada por jóvenes. Al ser una de las mejores playas de Venezuela para surfear, es común ver a deportistas locales y extranjeros tratando de lograr las mejores figuras sobre las crestas de las olas.
Sin embargo, también es escenario de tradiciones como el baile de tambor que se mantiene entre la gente joven, por lo que su sonido característico es el del repique de este instrumento de percusión. Los grupos de jóvenes se reúnen en la playa o en las pozas para tocar y bailar al son de estos repiques. Estos grupos son el centro de la atención y de la diversión durantes las noches de fiesta en el pueblo.
Una de las cosas que más sorprende de Cuyagua es lo bien cuidada y limpia que está la playa, gracias al esfuerzo de una comunidad que protege su permanencia como destino turístico. Los amantes de la aventura pueden además subir las montañas que rodean la bahía. El recorrido es escarpado y con acantilados, pero las espectaculares vistas panorámicas valen la pena. Y, por si fuera poco, también se puede disfrutar todo el año de un plato especial de pescado frito, acompañado de ensalada y deliciosos tostones.
La Costa de Oro
El municipio Ocumare de la Costa de Oro del estado Aragua ofrece playas y balnearios aptos en todas las épocas del año. Se ubica a solo 43 kilómetros de la capital del estado, Maracay, y reúne pintorescos poblados como Cata, Cuyagua, Independencia, Cumboto y Turiamo.
Es uno de los 18 municipios del estado y parte del grupo que tiene menor densidad poblacional. Está ubicado al noreste de Aragua y a 15 metros sobre el nivel del mar. Al ser parte de la costa y además estar rodeado por el Parque Nacional Henri Pittier es uno de los más turísticos. La carretera que conduce a Ocumare de la Costa es angosta, y en algunos lugares tiene muchas curvas, sin embargo, en el camino se pueden apreciar las bellezas naturales de este parque. Debido a su ubicación, gran parte de la vegetación es la característica de la selva nublada, con árboles frondosos y de gran tamaño.
Además de las más conocidas, ofrece otras playas muy famosas y concurridas, especialmente los fines de semana, como El Playón y la Bahía de Turiamo, donde funciona una base militar. Sin embargo, se puede acceder a la playa, desde donde se puede apreciar una espectacular vista. Ésta cuenta con colinas que rodean el pintoresco valle donde funcionaba una antigua hacienda de cacao que alberga enormes árboles cuya sombra hace el ambiente más agradable.
La Ciénaga es otra playa tranquila, ideal para las familias con niños, pues no tiene oleaje. Para llegar allí hay que tomar una lancha desde la boca de Ocumare. Esta playa de cristalinas aguas es un paradisiaco refugio de aves marinas. Además, ofrecen alquiler de toldos y venden comida.
Con información de Venezuela Tuya I, Venezuela Tuya II y Estado Aragua
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